Violencia de género
Condenado a 9 años y medio de cárcel por acosar, aterrorizar y controlar a su exnovia
Su comportamiento rozaba la obsesión. El relato minucioso de los hechos reproduce las múltiples formas en que el acusado intentó someter a Paloma, una viguesa de 43 años con un estado constante de temor.
Publicidad
En la madrugada del 4 de junio de 2022, Paloma vivió el inicio de su pesadilla. “El acusado, con ánimo de impedir que la víctima saliese del salón, se puso en el marco de la puerta dándole en el hombro para impedirle salir, generando en ésta un estado de temor que la llevó a encerrarse en su habitación y llamar a la policía”, detalla la sentencia.
A partir de ahí su ya ex pareja comenzó una campaña constante de hostigamiento que incluyó llamadas, mensajes a través de WhatsApp, Telegram y correos electrónicos, todos destinados a quebrantar la voluntad de Paloma de seguir adelante con su vida sin él. La presión psicológica era tal que la víctima se vio obligada a bloquearle en varias ocasiones y denunciar.
En agosto de 2022, la justicia dictó una orden de alejamiento de 200 metros, que el acusado desoyó. A pesar de las restricciones, el acusado no dudó en continuar con su persecución, acercándose al domicilio de la víctima y llamando insistentemente a su teléfono.
“El acusado, con manifiesto desprecio por el principio de autoridad que representaba la resolución dictada, incumplió de manera reiterada las medidas impuestas”, señala la sentencia. En septiembre de 2022, a pesar de la orden de alejamiento, el acusado hizo múltiples intentos de contacto, llegando incluso a enviar mensajes intimidatorios a través de WhatsApp, donde incluía expresiones como “TICTAAAAAAAAC” o “POCO TE QUEDA”, con el claro objetivo de generar angustia en su ex pareja.
Continuó con acoso psicológico
El abuso de poder y control fue tan evidente que el acusado no solo invadió la privacidad de Paloma al acceder a su cuenta de correo electrónico, sino que utilizó sus datos personales para realizar pedidos en su nombre, contactar con compañías de seguros, y enviarle publicidad no solicitada.
A pesar de las medidas judiciales, el acosador continuó con su ataque psicológico, y la situación se mantuvo insostenible para Paloma, quien, según los informes médicos, sufrió un grave deterioro psicológico y físico. La mujer experimentó trastornos de ansiedad y estrés postraumático como resultado directo de la persecución y las amenazas constantes.
La situación alcanzó su clímax cuando, el 15 de noviembre de 2022, el acusado persiguió a la víctima y su amiga en coche, causando un accidente al tratar de huir al ser descubierto. Este incidente, junto con otras violaciones de la orden de alejamiento, terminó con la detención del acusado.
La situación de Paloma se volvió insostenible, llevándola a vivir en una constante alerta, incapaz de llevar una vida normal. Pero el comportamiento del acusado no solo ha trastornado la vida de Paloma, sino que también a su entorno. A raíz del acoso, Paloma tuvo que abandonar su hogar y mudarse con sus padres, cambiar su número de teléfono en múltiples ocasiones, e incluso dejar de trabajar durante un tiempo debido al daño psicológico que sufría.
Trastornos psicológicos
En un intento por frenar el daño, el 19 de junio de 2023, el acusado fue liberado bajo ciertas condiciones, entre ellas la prohibición de acercarse a Paloma a menos de 600 metros y la colocación de un dispositivo telemático de control. Sin embargo, el acusado continuó desobedeciendo las medidas judiciales, efectuando más de 100 llamadas y acercándose a la víctima en más de 30 ocasiones, lo que llevó a su detención definitiva en julio de 2023.
La constante violación de su privacidad y el miedo a la presencia del acusado le provocaron a Paloma trastornos psicológicos. “El acusado desarrolló la conducta anterior desde el 4 de junio de 2022 hasta el 23 de julio de 2023, que sólo cesó en los periodos de prisión provisional, causando en la víctima un menoscabo psíquico que precisó tratamiento médico para su trastorno de ansiedad”, se lee en el fallo judicial.
El Juzgado de lo Penal nº 1 de Vigo ha condenado al hombre a 9 años y medio de prisión por delitos de acoso, un delito continuado de amenazas, de descubrimiento y revelación de secretos, de lesiones y contra la seguridad vial, así como el pago de 23.000 euros en concepto de responsabilidad civil a mayores de una pena de multa de 3.240 euros. Y casi lo más importante, mantener la situación de prisión provisional hasta que se ejecute esta sentencia, contra la que cabía recurso de apelación.
Más Noticias
- Tenso enfrentamiento entre un grupo de okupas y una empresa de desokupación en Carabanchel: "¡Han pegado a la señora!"
- Descubren túneles y refugios de la Guerra Civil en el interior de varias viviendas de Paiporta
- Un hombre y una mujer confiesan haber agredido sexualmente a las dos hijas de un amigo en Palma
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y no te pierdas la última hora y toda la actualidad de antena3noticias.com
Publicidad