Condenados a 9 meses de cárcel por construir un muro en la piscina comunitaria e impedir que la usen el resto de vecinos

Ni nadar unos largos ni darse un chapuzón. Durante 4 años ningún vecino de una finca de Palma pudo disfrutar de la piscina situada en la zona comunitaria. El motivo es que dos vecinos de la misma comunidad construyeron un muro que impedía el acceso. Según el diario 'Ultima hora' de Mallorca, se trata de una madre y un hijo que dejaron al resto de propietarios sin poder darse un baño durante 4 años.

Ahora, una sentencia ratificada por la Audiencia Provincial les impone una pena de prisión de 9 meses por un delito de coacciones. La acusada residía junto al resto de propietarios en una finca dividida en tres viviendas y una zona ajardinada de unos 120 metros con una piscina y que era común para los propietarios. Pero la familia condenada construyó un muro y una puerta de acceso que impedía el paso al resto de sus vecinos, convirtiendo en privada una zona que era común.

La piscina comunitaria se convirtió en una piscina exclusiva

Tal y como apunta el diario, la convivencia entre vecinos saltó por los aires cuando los condenados crearon un espacio exclusivo para ellos y excluyente para el resto. Tras un cruce de acusaciones, intentos de mediación y denuncias en los que se alertaba a esos vecinos de que el acceso a la piscina debía ser libre, se interpuso una demanda y se fijó una sentencia que ahora ha ratificado la Audiencia Provincial.

En su defensa, madre e hijo siempre han mantenido que con ese muro solo querían protegerse de los ladrones porque habían sido víctimas de un robo. Además, siempre han mantenido que el resto de propietarios podían acceder a la piscina.

La condena a 9 meses de cárcel incluye también una indemnización al resto de vecinos de 24.000 euros como pago por todos los meses que no pudieron disfrutar de un baño en la piscina.

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