Coronavirus
Una confitería de Sevilla reparte 3.000 torrijas al personal sanitario por su labor ante la pandemia del coronavirus
Para agradecer el duro trabajo y el esfuerzo del personal sanitario durante la pandemia del coronavirus, La Campana, una confitería de Sevilla, repartirá 3.000 torrijas entre los principales hospitales de la ciudad.
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Coronavirus
Una confitería de Sevilla reparte 3.000 torrijas al personal sanitario por su labor ante la pandemia del coronavirus
Para agradecer el duro trabajo y el esfuerzo del personal sanitario durante la pandemia del coronavirus, La Campana, una confitería de Sevilla, repartirá 3.000 torrijas entre los principales hospitales de la ciudad.
Tras un año de pandemia del coronavirus, de duras restricciones y duro trabajo por parte de los sanitarios, de nuevo la Semana Santa ha tenido que ser cancelada, aunque no de la misma manera que en marzo-abril de 2020. Por todo el esfuerzo y como agradecimiento por su trabajo, La Campana, una confitería de Sevilla, ha querido repartir al personal sanitario de distintos hospitales de la ciudad 3.000 torrijas para celebrar la Semana Santa, aunque sea de una manera inesperada.
Hospitales que recibirán las 3.000 torrijas
La Campana repartirá este Jueves Santo las 3.000 torrijas para el personal sanitario. El establecimiento, ubicado en la Calle Sierpes, 1, 3, (41004), distribuirá entre los principales hospitales de la capital andaluza este postre tan típico en estas fechas.
Los hospitales donde los sanitarios podrán disfrutar de estas torrijas son: el Hospital Virgen del Rocío, el Virgen Macarena, el Valme, un centro de Cáritas y el antiguo hospital militar Vigil de Quiñones, reabierto como Hospital de Emergencia Covid-19.
¿Cómo se llevó a cabo esta iniciativa?
Según señala el personal de la confitería, dicha iniciativa ya se llevó a cabo la pasada Semana Santa y este 2021 han querido volver a repetirlo, ya que "con este pequeño gesto, queremos agradecer a este colectivo el sacrificado trabajo que han realizado desde que empezó la pandemia. Estamos orgullosos de poder aportar nuestro 'granito de azúcar' y endulzar, aunque sea por un ratito, el ánimo de nuestros sanitarios. Es nuestro deseo acabar con este virus cuanto antes y que este pequeño homenaje al personal sanitario se convierta en una bonita tradición para muchos años", aseguran.
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