Conocer nuestro pasado a través de la onomástica: "Mis abuelos podían saber, mirando los apellidos, de dónde era la persona fallecida"

En España, conservamos los dos. El origen de su registro está en el siglo IX, aunque por aquel entonces no se mantenían de padres a hijos, sino que cambiaban en función de la ascendencia, oficio o lugar de procedencia. Hablamos de los apellidos, una parte de nuestra identidad cuya relevancia despierta el interés de cada vez más personas.

Esa curiosidad fue, precisamente, la que llevó a María José Ginzo a desarrollar una completa investigación relacionada con esta cuestión. El título de su trabajo, 'Técnicas estadísticas en geolingüística. Modelización onomástica'. Se trata de una investigación que arrancaba en el año 2013 fruto de una intensa colaboración con investigadores del Instituto da Lingua Galega (ILG), en particular con el profesor Xulio Sousa, a través de la Red de Tecnoloxías de Análise de datos Lingüísticos (TecAnDaLi), y dio lugar a una tesis que concluía en 2022 con la defensa de esta, dirigida por la profesora Rosa Crujeiras.

Pero el interés de María José comenzaba mucho antes: "Desde pequeña siempre me interesó este tema", explica la investigadora. Le resultaba curioso ver como sus abuelos, naturales de A Pontenova (Lugo), eran capaces de localizar a una persona por su apellido. Cuando se publicaba una nota necrológica, "podían saber, mirando los apellidos, de dónde era la persona fallecida, si de un lado u otro del Eo –el río que divide a este municipio lucense".

Mejor tesis en el campo de las humanidades digitales

Las conclusiones y los resultados del trabajo de Ginzo permiten comprender la relevancia de los apellidos para aportar información sobre cuestiones diversas: "Los apellidos hablan mucho de los movimientos migratorios de la población y revelan, precisamente, esos desplazamientos y las características de las poblaciones", comenta la investigadora.

Aplicando sus conocimientos, en un campo tan complejo como el de la estadística, Ginzo desarrolló una tesis de carácter multidisciplinar que ha sido recientemente reconocida por la Sociedad Internacional de Humanidades Digitales Hispánicas (HDH) y la Fundación BBVA como la Mejor Tesis Doctoral 2023 en el ámbito de las Humanidades Digitales.

El jurado valoró, sobre todo, la exploración de nuevos métodos para el estudio de la onomástica, analizando las relaciones entre la estructura demográfica y social de las poblaciones y la organización lingüística. Un trabajo, en síntesis, que parte de una realidad como es la "construcción de regiones de apellidos en Galicia", una realidad que existe también en otros territorios.

Precisamente, la investigación incorporó también otras realidades, como la asturiana o la catalana, utilizando incluso datos de Valencia y Baleares. Los resultados concluyen que la regionalización de los apellidos en Asturias es similar a la actual división en variedades dialectales del asturiano (bable occidental, bable central y bable oriental) y de forma análoga para las comunidades españolas de habla de la lengua catalana (Cataluña, Comunidad Valenciana e Islas Baleares).

María José, que continúa desarrollando su labor de docencia e investigación en el Departamento de Estadística, Análisis Matemático y Optimización de la USC, reconoce que su trabajo resulta "interesante no solo desde el punto de vista estadístico, sino lingüístico o geográfico". De hecho, tiene en mente ya nuevas líneas para proseguir con un trabajo tan curioso como interesante para saber más sobre nuestros antepasados.

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