Pelea en un pub
Cuatro policías heridos tras una batalla campal en A Coruña: “Este pub se está convirtiendo en la ruina del barrio de Matogrande”
Un local nocturno del barrio coruñés de Matogrande está acabando con la paciencia de los vecinos. El último incidente se saldó con cuatro policías locales heridos y cinco detenidos. Los clientes del local tiraron piedras a los agentes.
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Eran las cinco y media de la madrugada del pasado sábado cuando la policía local de A Coruña acudió al establecimiento de ocio nocturno Ginger, en Matogrande, para realizar un control de horario. El local seguía abierto después de la hora de cierre permitida. Al llegar constataron que había más personas de las permitidas en su interior, unas 150, por lo que procedieron a desalojarlo y cerrar el negocio. Se trata, según los informes de la policía local, de un establecimiento conflictivo en el que ya han tenido que intervenir otras veces debido a quejas de los vecinos del barrio y peleas registradas en el exterior del pub.
Aunque inicialmente el operativo transcurrió sin problemas, en el exterior y al retirarse los agentes, se desató un enfrentamiento violento entre los clientes del local y la policía local que incluyó incluso el lanzamiento de piedra contra la autoridad, tal y como se refleja en los vídeos que los testigos compartieron en redes sociales.
Como resultado, cuatro policías sufrieron heridas leves por contusiones y cinco personas fueron arrestadas, entre ellas tres miembros de una misma familia y una pareja. Uno de los implicados fue denunciado en otro local cercano, pero no fue detenido.
Acabaron en urgencias
Los agentes acudieron a urgencias para recibir atención médica por las heridas sufridas y para poder imputar el agravante de lesiones a los detenidos. Este incidente no es aislado, ya que el establecimiento ha sido objeto de intervenciones policiales anteriores, incluyendo una en enero de 2023, cuando se incautaron drogas, y otra en mayo del mismo año, en la que se confiscaron hachís y cocaína.
Además, los vecinos han denunciado en múltiples ocasiones que el local no respeta los horarios y genera ruidos molestos. “El problema empezó hace unos 5 años, cuando el dueño del bar que estaba al lado del after, también se hizo con el local de copas, se convirtió en un pack terrible para nosotros”. Aseguran que están hartos de los jaleos semanales y la inseguridad que conlleva compartir calle con un local de estas características. “Hay escándalos de jueves a domingo todos los días, desde las siete de la mañana, que es cuando los clientes salen borrachos al exterior y normalmente se suele liar, suele afectar a los taxistas que están en la zona, que ya se han negado a llevarlos porque ha habido peleas, y también a los locales y establecimientos que abren a esa hora”.
Los inquilinos de Matogrande han tenido que ver de todo, “escenas de sexo en la calle, peleas, trapicheos…todo ello sale del pub. La policía viene cada semana y creemos que este local se va a convertir en la ruina del barrio”.
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