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EL FUEGO QUE CAMBIÓ LA LUCHA CONTRA LOS INCENDIOS
Se cumplen diez años del incendio de Guadalajara en el que murieron once personas
El 17 de julio de 2005 murieron once agentes forestales en el peor incendio sufrido en España en dos décadas. La chispa de una barbacoa en una zona recreativa en Riba de Saelices fue la causa del incendio que arrasó 16.000 hectáreas del Parque Natural del Alto Tajo. El responsable fue condenado a dos años de cárcel y una multa de 10 millones de euros. A raíz de este caso, la Junta de Castilla-La Mancha estableció límites para este tipo de espacios y para encender fuego en las barbacoas.
El 17 de julio de 2005, once agentes forestales perdieron la vida cuando intentaban frenar el incendio declarado un día antes en el municipio de Riba de Saelices, en Guadalajara, donde una barbacoa, que actualmente ya no existe, fue el origen de un fuego en el que fallecieron dos agentes medioambientales y nueve bomberos forestales miembros del retén de Cogolludo.
Una barbacoa prendida por un grupo de excursionistas que terminó en una tragedia y que años después de un proceso judicial largo concluyó con la condena de M.H., el excursionista que inició el fuego, a dos años de cárcel y el pago de una indemnización de 10.640.000 euros, y con la absolución de los otros dos procesados que le ayudaron a encender este fuego, en un día de fuertes rachas de viento e intenso calor.
En el caso del incendio de Guadalajara, en el que llegaron a estar imputadas 29 personas, entre ellas la que fuera entonces consejera de Medio Ambiente, Rosario Arévalo, se cerró con un único condenado.
A raíz de este caso, la Junta de Castilla-La Mancha estableció límites para este tipo de espacios y para encender fuego en las barbacoas. Diez años después, la zona calcinada sigue en proceso de regeneración y los vecinos se quejan de falta de medios para afrontar estas tragedias.
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