La Unión Federal de Policía denuncia la imposibilidad de controlar el cruce ilegal que cada día realizan miles de personas en la frontera de Melilla, por la falta de medios.
El portavoz de la UFP, Serafín Garrido, denuncia que cada día tratan de pasar la frontera decenas de argelinos con pasaportes marroquíes falsificados. "Es imposible hacer un control exhaustivo de todos", comenta.
A esto hay que sumar el tráfico de personas que se produce diariamente en coches destartalados. "Cruzan la frontera aspirando a que el centro de acogida se sature y les envíen a la Península", afirma Giraldo, quien denuncia que las pateras han sido sustituidas por vehículos destartalados donde esconden a los subsaharianos.
Además, el contrabando. Miles de personas cruzan a diario la frontera de Melilla cargadas de voluminosos bultos. "Con el volumen de tránsito que hay es imposible hacer un control efectivo", denuncia Giraldo, quien también apunta a los cientos de residentes marroquíes que están empadronados en la península que cruzan la frontera para no perder los beneficios sociales".
Por último, tampoco hay control de los vehículos que entran, señala Giraldo, quien además denuncia un convenio para que los taxis puedan cruzar la frontera sin control fronterizo.
La UFP denuncia además que el personal de apoyo anunciado por la delegación del gobierno en Melilla ni es suficiente ni está formada en cuestiones de control de extranjería y frontera.
¿Hemos tirado la toalla del Estado de Derecho en Melilla?, se pregunta Giraldo para cerrar el comunicado de la denuncia de la UFP.
