Jaén

Declaran culpable al acusado de asesinar y violar en Jaén a Khawla, una niña de 14 años

El cuerpo de la menor fue hallado en las ruinas de la Iglesia de Santo Domingo.

El declarado culpable sale de la sala de vistas de la Audiencia de Jaén

El declarado culpable sale de la sala de vistas de la Audiencia de JaénEuropa Press

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El joven de 25 años acusado de matar y violar en Alcalá la Real (Jaén) a Khawla, una niña de 14 años, ha sido declarado culpable por el jurado por unanimidad. Perpetró el crimen en febrero de 2022 y el cuerpo de la menor fue hallado en las ruinas de la Iglesia de Santo Domingo. El acusado se citó con la menor aquella noche en la que la violó y la mató.

Ahora se enfrenta a una petición de la Fiscalía y de la acusación particular de prisión permanente revisable. Tras cometer el crimen, el joven de 25 años fue el que avisó a las autoridades para confesar lo que había hecho. Esperó a los agentes cuando se perdonaron. El jurado ha estimado el atenuante de confesión para los dos delitos como había solicitado su defensa.

El jurado ha rechazado la tesis de la defensa que solicitaba homicidio impudente y por profanación de cadáver. El juicio ha tenido lugar en la Audiencia de Jaén y el acusado ha manifestado que la muerte de la niña de 14 años fue por practicar de forma "consentida" el juego de la asfixia. Ha señalado que la violación se produjo cuando Khawla ya había muerto.

Estuvo cinco minutos apretando su cuello tras perder el conocimiento

La Fiscalía ha defendido la muerte de la menor no fue accidental por someterse al juego de la asfixia. "No es posible matar a una persona por asfixia sin querer y sin darse cuenta por mucho que quiera el acusado", manifestó la fiscal. Algo que ha sido apoyado por el veredicto del jurado. La pequeña perdió el conocimiento a los 30 segundos, aunque murió pasados los cinco minutos, el tiempo que estuvo el acusado apretando su cuello.

En este sentido, el jurado determina que fue un asesinato alevoso ya que la joven de 14 años "no tuvo ninguna posibilidad de defenderse en ese momento". El acusado ejerció "una anulación completa" de cualquier posibilidad de defensa. Además de la prisión permanente revisable, el fiscal y la acusación particular piden 15 años por agresión sexual y 480.000 euros.

Durante el examen se señaló que el acusado padece de un "trastorno antisocial de la personalidad", lo que lo define como un "psicópata". Detallaron que "no mostró ni arrepentimiento ni culpa", evidenciando su "falta de empatía" y que "sus intereses están por encima de los demás".

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