La jueza del Contencioso 2 de Valladolid ha autorizado a la Consejería de Sanidad de Castilla y León a confinar diez viviendas en Valladolid para mantener una cuarentena hasta al menos el próximo 24 de agosto, pudiendo prorrogarse en función de los resultados de los test de coronavirus que se practiquen, para contener un rebrote que en el que se han sido contabilizado un total de 23 casos y hay 61 personas en seguimiento.
Las diez viviendas se encuentran en el barrio de las Delicias y solo podrán recibir visitas aquellas personas dependientes que lo necesiten. Se trata de un rebrote de coronavirus detectado hace cinco días y durante este viernes han sido notificados nueve casos nuevos. Estos pacientes forman parte de entornos familiares y mixto, tiene sintomatología leve o asintomáticos, ninguno ha tenido que ser hospitalizado y todos se encuentran en situación de aislamiento domiciliario
La labor de control se ha extendido a la provincia de Segovia, concretamente en una empresa de procesado de hortalizas de Chatún, donde se han realizado pruebas a nueve trabajadores dando positivo siete de ellos, dentro del citado brote ya que viven en Valladolid pero trabajan allí.
La magistrada ha explicado en el auto que esta decisión "se trata de medidas urgentes y necesarias para la salud pública atendiendo a las circunstancias concurrentes, todas ellas relacionadas con la situación de emergencia producida por el coronavirus".
Además, añade que "la medida de aislamiento y cuarentena domiciliaria obligatoria acordada es necesaria e idónea para evitar la propagación de los contagios, pues no existe una medida menos gravosa o lesiva para la consecución del objetivo propuesto, y que el sacrificio de derecho y/o libertades reporta más beneficios al interés general que desventajas o perjuicios a otros bienes o derechos atendidos la gravedad de la injerencia y las circunstancias personales de quien la sufre".
Mascarilla obligatoria en Castilla y León desde el sábado
Para tratar de controlar los rebrotes de coronavirus, Castilla y León impondrá el uso obligatorio de la mascarilla a partir del próximo sábado 18 de julio, aunque se cumple la distancia de seguridad, en las vías públicas, ámbitos urbanos al aire libre y espacios cerrados de uso público o abiertos al público.