Multa
Multan en Toledo a un vecino de Lleida y asegura que ni él ni su quad nunca han estado allí
Julián, vecino de Lleida, ha perdido 7 puntos del carné y ha pagado una multa de 400 euros.
Publicidad
Julián todavía no da crédito a lo que le ha sucedido. Hace unos meses le llegaron unas multas referentes a un quad del que es propietario y que asegura que nunca cometió.
Las sanciones, que la policía ubica en una carretera secundaria de Toledo, son por haberse dado a la fuga y la otra, por circular sin casco. Lo insólito es que, según Julián: "Jamás he estado en Toledo y mi vehículo jamás ha salido de la zona donde resido". Es decir de Almacelles, un pequeño pueblo de Lleida y recalca: "la máxima distancia que recorre mi vehículo son 30 km cada dos años cuando lo llevo a pasar la ITV".
Explica a Antena 3 Noticias que en un principio pensó que se trataba de un error tipográfico y se puso a disposición de la policía de inmediato. "Les he mandado fotos, me he puesto en sus manos para que controlen mi teléfono, me geolocalicen, para que vigilen mis cuentas de ese fin de semana, porque si estuve allí tiene que haber algún gasto, una llamada telefónica desde el lugar y jamás lo pueden demostrar, porque jamás estuve allí", asegura.
Además añade, "si tengo que llevar un quad tendría un gancho en mis otros vehículos para llevarlo en un remolque, que no tengo, o habría contratado a una empresa para que me lo llevara hasta allí". Nos cuenta que le han "amargado", no costaba nada comprobar "en el momento de los hechos que era yo, si estaba en Lleida con mi quad o no".
Ha interpuesto varios recursos
Julian ha interpuesto varios recursos por que él entiende que quizá le han duplicado la matrícula pero explica que todo ha sido en vano: "me han quitado 7 puntos del carné de los 15 que tenía por que no tenía ninguna multa, 400 euros de sanción y a parte los poderes que he pagado a los abogados". Asegura que se siente impotente: "¿dónde queda mi presunción de inocencia?", se pregunta
Ahora tiene que esperar al 2025 para que se celebre el juicio. Mientras a Julián no le queda más remedio que tener paciencia y esperar.
Publicidad