Un equipo conjunto de investigación formado por agentes de la Guardia Civil, de la policía belga y de Europol ha detenido a 46 personas y ha imputado a otras 5, como presuntos integrantes de una de las más importantes organizaciones delictivas de narcotráfico y blanqueo de capitales, formada principalmente por ciudadanos marroquíes.
En la llamada 'operación Tunido' se han intervenido además 5.000 kilos de hachís, dos embarcaciones de pesca, 77 vehículos, 20 inmuebles, 5 sociedades y 225.230 euros en efectivo, todo ello valorado en 13.750.000 euros.
La organización disponía de personas ubicadas en el continente africano que se encargaban del cultivo de las plantaciones de cannabis y de todo el proceso de elaboración de la sustancia estupefaciente.
Finalizada la operación y marcaje del envasado de la droga según su calidad, la organización almacenaba el hachís hasta que era recogido para su introducción en España.
El traslado hasta las costas españolas se llevaba a cabo mediante embarcaciones neumáticas o recreativas que partían desde Marruecos.
Para el blanqueo de dinero de la venta de los estupefacientes, los narcotraficantes contaban con un experto en esta actividad.
Esta persona, oculta tras un discreto negocio de venta al por menor de marroquinería y venta de productos de cuero situado en una zona comercial de Torremolinos, en Málaga, y su lugarteniente, utilizando empresas interpuestas y movimiento de dinero a terceros países, podrían haber colocado más de 13 millones de euros en el mercado legal.
