Desarticulan una banda que chatajeaba a los chalés que robaba

Entre los nueve detenidos, la mayoría rumanos, hay un Guardia Civil. El agente facilitaba a sus compinches información a la que tenía acceso.

Los asaltantes elegían sobre todo residencias de empresarios con alto poder adquisitivo. Les amenazaban con armas de fuego o les mantenían secuestrados durante horas hasta conseguir el botín. En algunos de sus golpes obtuvieron más de 110.000 euros.