Violencia de Género
Detenido en Santiago por agredir con un cuchillo a su mujer en la cara y los brazos
La víctima, que sufrió heridas en la cara y los brazos, consiguió quitarle el arma y logró huir.
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Es el segundo episodio de violencia de género que se registra en la capital gallega en una semana. Esta vez fue un hombre, de 67 años, el que agredió a su mujer en la vivienda familiar en torno a las 20:30 del sábado.
Todo apunta a que tuvieron una fuerte discusión y, en el transcurso de la misma, el hombre cogió un cuchillo de la cocina y agredió a la víctima. Ella forcejeó con él y fue entonces cuando le causó heridas en la cara y los brazos. Consiguió entonces la mujer hacerse con el arma y el presunto agresor regresó a la cocina a por otro cuchillo.
En ese momento la víctima, de 66 años, aprovechó para huir, bajar a la calle y alertar a la Policía Local, que pronto se personó en el lugar. Cuando llegaron los agentes encontraron a la mujer herida, aunque no de gravedad, y al hombre que ya había llegado, persiguiéndola, hasta la calle con el cuchillo en la mano.
Se entregó sin oponer resistencia
El agresor se entregó sin oponer resistencia y facilitó el arma a los agentes. Una ambulancia atendió a la mujer en el mismo lugar por un traumatismo y pequeños cortes, y no tuvo que ser derivada a un centro hospitalario ya que las lesiones no revestían gravedad.
Él fue detenido y derivado a las dependencias de la Policía Nacional. Ahora, se encuentra a la espera de pasar a disposición judicial por un presunto delito de violencia de género, al que se le podría sumar otro de lesiones.
Al parecer el hombre precisa de un tratamiento que habría dejado de tomar hace unos días, lo cual podría haber favorecido que se desestabilizase y reaccionase de un modo agresivo.
Todo esto ocurre en la misma semana en la que se registró otro episodio de violencia de género en Santiago. Un hombre de 37 años, que ya ha ingresado en prisión, apuñaló por la espalda a su pareja y la persiguió por la calle. Ella logró huir pero se desplomó a causa de la gravedad de las heridas. La Policía Local de Santiago detuvo al agresor a escasos 20 metros de la víctima.
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