Explotación sexual

Detenidos 37 integrantes de una banda dedicada a explotar sexualmente a diez menores en Madrid

La Policía Nacional ha desarticulado la red que obligaba a las menores a ofrecer servicios sexuales a clientes a los que suministraban sustancias estupefacientes.

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Detenidos los 37 integrantes de una banda que explotaba sexualmente a 10 menores. La Policía Nacional ha desarticulado la red que obligaba a las menores a consumir y distribuir sustancias estupefacientes.

Entre los detenidos se encuentra un hombre ecuatoriano de 65 años, que estaba en prisión acusado de matar a otro de un puñetazo el 12 de agosto de 2021 en la avenida de Monte Igueldo, en el distrito madrileño de Puente de Vallecas. Otro de los detenidos es un cantante de rap de YouTube, conocido como Saymol Fyly, con más de 150.000 suscriptores en esta red social. La mayoría de la banda son dominicanos y, tras pasar a disposición judicial, el juez decretó el ingreso en prisión de ocho de ellos.

La investigación policial arrancó el pasado mes de abril, al descubrirse que una menor salía de forma asidua de su lugar de residencia. Los investigadores averiguaron que durante sus ausencias mantenía relaciones sexuales con personas mayores de edad a cambio de dinero o de drogas. Otras compañeras de esta menor también realizaban las mismas salidas con el mismo objetivo.

La Policía Nacional ha informado que 9 de estas 10 menores estaban tuteladas por la Comunidad de Madrid, pero el Gobierno regional lo niega. Aseguran que una de ellas sí que está ahora en uno de los centros de menores, precisamente para "alejarla de esas redes"

Así actuaba la banda desarticulada

Los detenidos contactaban con las menores a través de redes sociales y así lograban ganarse su confianza. Una vez conseguían esto, las utilizaban para ofrecer servicios sexuales a clientes a los que suministraban sustancias estupefacientes. En algunos casos las obligaban a distribuir ellas mismas la droga y, tras la entrega, eran agredidas sexualmente por los clientes.

Una de las menores permaneció durante tres días encerrada en una habitación de un narcopiso del distrito de Usera, regenteado por una de las detenidas. Allí el procedimiento era el mismo: cuando entraban los clientes para adquirir su dosis, la mujer les ofrecía tener sexo con la menor. En un momento de descuido, la víctima logró zafarse y pidió ayuda en un estanco próximo, desde donde avisaron a la Policía Nacional.

Los agentes descubrieron que uno de los responsables de este entramado criminal había solicitado los servicios de una de las menores. Reservó un vehículo con conductor para que la trasladase desde el narcopiso hasta su vivienda y, una vez allí, él y otros tres hombres abusaron sexualmente de la chica.

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