Un furgón de la Guardia Civil entra en la Audiencia Nacional

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UNO DE ELLOS ES EL PATRÓN DE LA EMBARCACIÓN

Detenidos dos inmigrantes que amenazaron con tirar niños de una patera si los detenían

La Guardia Civil ha detenido al patrón de una patera y a un inmigrante, ambos subsaharianos, que llegaron a Melilla el pasado 4 de julio tras amenazar a los agentes del Grupo Especialista de Aactividades Subacuáticas (GEAS) con lanzar a los menores que viajaban en la embarcación al agua.

El patrón de una patera que amenazó con tirar a menores de la embarcación si los detenían, que responde a las iniciales M.T., de 24 años y procedente Burkina Faso, ha ingresado en prisión por un delito contra los ciudadanos extranjeros, en tanto que el segundo detenido, S.G., de 27 años y natural de Mali, ha quedado en libertad con cargos por un delito de amenazas.

Según informa la Guardia Civil en una nota, la patera llegó en la mañana del pasado día 4 a la playa de los Cárabos de Melilla, donde, al tocar tierra, los inmigrantes varones se dieron a la fuga, lo que impidió que en aquellos momentos pudiesen ser interceptados y que se tramitase respecto de ellos la documentación en aplicación de la vigente Ley de Extranjería. Sólo las mujeres y los menores permanecieron en lugar y pudieron ser atendidos por los agentes.

La Guardia Civil abrió unas diligencias debido a la actitud de alguno de los inmigrantes, en concreto de la persona que patroneaba la embarcación, que se cubría la cara para no ser identificado, portando una gorra y una cazadora de color oscuro, así como otro subsahariano que procedía a exhibir a un menor a los guardias civiles y hacía señas inequívocas de arrojarlo al mar.

Durante todos estos días la Guardia Civil ha estado realizando gestiones para la determinación de los supuestos autores de los hechos delictivos descritos, que han sido identificados "sin género de dudas" por los testigos, por lo que han sido apresados.

Entre las pruebas aportadas, se constata cómo momentos antes de llegar la embarcación a la playa, su patrón se quitó la cazadora que vestía y la gorra que portaba, y se la entregó a otro inmigrante, ocultándose acto seguido entre los demás ocupantes de la patera para no ser identificado.

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