Publicidad
EN SU MAYORÍA CIUDADANOS CHILENOS
Detenidos los 23 presuntos integrantes de una banda de ladrones especializada en cajeros automáticos
Esta banda de ladrones, especializada en el robo en cajeros automáticos que hacían volar con explosivos, inicialmente actuaba por toda Cataluña pero después amplió su radio de acción a Madrid, Valencia, Vitoria y Pamplona.
Los Mossos d'Esquadra han detenido a 23 presuntos integrantes de una banda de ladrones especializada en el robo en cajeros automáticos, que hacían volar con explosivos.
La
banda robaba también en domicilios y en vehículos y estaba integrada en su
mayoría por ciudadanos chilenos que inicialmente actuaban por toda Cataluña, pero que más tarde ampliaron su radio de acción a Madrid, Valencia, Vitoria y
Pamplona, por lo que la Policía Nacional se sumó a la investigación iniciada
por los Mossos.
En
una primera fase de la operación policial, entre abril y agosto de 2016, los
Mossos detuvieron a 14 personas, en su mayoría chilenas, por la comisión de
estafas y robos en domicilios y en cajeros automáticos, que hacían volar
utilizando gases explosivos. En concreto, los Mossos los consideran autores de
un robo en un centro comercial de una localidad cercana a Barcelona, donde
utilizaron explosivos para hacer volar dos cajeros automáticos y, para
dificultar su persecución por parte de la Policía, atravesaron en las
diferentes vías de huida vehículos robados, esparcieron por el suelo clavos y
colocaron y prendieron fuego a colchones.
La
Policía catalana también les achaca numerosas estafas, que cometían tras robar
documentos de identidad y tarjetas bancarias, y utilizarlas para sacar dinero
en efectivo en bancos. Para ello, 'contrataban' a ciudadanos españoles que, a
cambio de dinero, se hacían pasar por los titulares de las tarjetas para
retirar el dinero en efectivo en bancos, en su mayoría de Cataluña, aunque
también actuaron en alguna sucursal en Valencia, Vitoria y Pamplona.
Los
Mossos, que les atribuyen asimismo una veintena de robos con fuerza en
domicilios, localizaron en los registros practicados en sus domicilios un
centenar de DNI robados, joyas, relojes y aparatos electrónicos y numerosos
clavos y pinchos metálicos y dinero en efectivo manchado de tinta, mecanismo de
seguridad que se activa de forma automática en los cajeros de los bancos cuando
los billetes son sustraídos por la fuerza.
La
segunda fase de la operación se puso en marcha cuando se detectó que el grupo
había empezado a actuar en la Comunidad de Madrid y los Mossos y la Policía
Nacional constituyeron un grupo de investigación conjunto. En esta ocasión se
detuvo a nueve personas, la mayoría también de origen chileno, a quienes se
atribuye una quincena de robos en domicilios en toda Cataluña y dos robos en
cajeros automáticos mediante el uso de explosivos.
Los
agentes practicaron siete registros en los que encontraron objetos procedentes
de los robos cometidos en viviendas, además de cuatro kilos de marihuana, y
lograron identificar a las personas que compraban los objetos robados y a otras
que falsificaban documentos usados por la red, que invertía sus beneficios en
la compra de vehículos de alta gama, en propiedades inmobiliarias y en oro.
El
juez mandó a prisión a 10 de los 23 detenidos, algunos de los cuales acumulan
antecedentes en diferentes países europeos como Francia, Alemania, Bélgica,
Holanda, Suecia, Italia y Reino Unido.
Publicidad