Tres encapuchados entran en un local de juego. Arman un gran alboroto para desconcertar a empleados y clientes y hacerse con el control del establecimiento. Son tres delincuentes conocidos por la Policía: 'el Garbanzo', 'el Loco' y 'el Aarón'.
Tienen entre 25 y 32 años. "Siendo menores de edad ya habían cometido hechos delictivos similares, robos con violencia, robos con fuerza, y alguno de ellos tiene hasta 20 antecedentes similares", explica un portavoz de la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
Especializados en asaltar locales de apuestas deportivas y salones de juego, iban armados con una pistola, machetes o un hacha. Actuaban cuando el local estaba abierto al público. Los clientes contemplaban inmóviles el asalto, alguno de ellos incluso de forma muy relajada.
"En ningún momento llegaron a agredir. Amenazaban, había forcejeos, arrojaban al suelo a las personas, pero en ningún caso hubo ningún tipo de agresión grave ni a los empleados ni a los clientes", añade el mismo portavoz policial.
La banda asaltó 17 locales. Los tres delincuentes actuaban siempre de la misma forma: uno de ellos iba directamente a la caja para hacerse con el dinero y los otros dos atemorizaban a los clientes para evitar cualquier posible reacción.
Ya con el dinero, el grupo huyó. El robo duró 51 segundos, y en seis meses lograron 131.000 euros. Llegaban y huían en coches robados. Uno de estos vehículos, que hundieron en un pantano cerca de Madrid, fue la pista que llevó a la Policía hasta los presuntos autores.
