Día de los Fieles Difuntos o Día de Muertos, ¿qué se celebra el 2 de noviembre?

El Día de los Fieles Difuntos es una jornada que se celebra en memoria de los fallecidos cada 2 de noviembre. En algunos países también es conocido como Día de Muertos. Esta celebración es de carácter religioso y se hace, principalmente, en países de asentada tradición cristiana. También se le conoce como Conmemoración de Todos los Fieles Difuntos y sigue la línea del día anterior, 1 noviembre, Día de Todos los Santos.

¿Cómo se celebra el Día de Fieles Difuntos en España?

El día 2 de noviembre en España es un día dedicado a orar por aquellos familiares y allegados fallecidos. El Día de Fieles Difuntos es tradición acudir a misa y, antiguamente, tenía carácter de jornada festiva. La tradición dice que hay que rezar por las almas de los difuntos porque cuando mueren no han sido limpiadas de sus pecados y se encuentran en estado de purificación en el purgatorio.

Los fieles rezan y ofrecen sus oraciones o sufragios y acuden a misa en el Día de los Fieles Difuntos para que sus almas puedan llegar a estar con Dios. Esta es la tradición de la religión católica, la más presente en España. Mientras que el día 1, el Día de Todos los Santos, se vive una jornada más festiva, el 2 de noviembre es un día de recogimiento y destinado a la oración. La primera vez que se celebró este día fue en el año 998 por iniciativa del monje Odilón de Cluny. Fue ya en el siglo XVI cuando fue adoptada por la iglesia de Roma y se impuso en todo el mundo.

El Día de Muertos en otras culturas

Mientras que en España la jornada del Día de los Fieles Difuntos es un día de oración, en otros países viven el 2 de noviembre con una perspectiva diferente aunque siempre con el recuerdo a los fallecidos muy presente. El Día de Muertos en los países de Centroamérica es una de las jornadas más especiales de todo el año. Aunque cada país tiene sus propias tradiciones, las más conocidas son, sin duda, las de México.

El Día de Muertos en el país azteca es una fiesta grande que empieza ya en el día 1, cuando se recuerda a los niños fallecidos. En esta celebración se han unido el espíritu religioso llevado por los cristianos europeos hasta México junto con las tradiciones propias de los indígenas de la zona. La historia indicaba que durante estos días las almas de los difuntos volvían a su hogar a visitar a sus familiares.

Así, en el Día de Muertos, se les honra y proporciona sustento mediante el levantamiento de altares en las casas. En estos se les deja alimentos tales como calaveras de azúcar o pan de muerto, dos comidas propias de este día, y también flores, velas y diferentes cosas que eran del gusto del fallecido en vida. Este día de Fieles Difuntos es tan importante que fue declarado como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en el año 2008 por la UNESCO.

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