Se disfraza de Spiderman para robar en un bar de Granada y solo consigue llevarse una botella de agua

Un suceso de lo más estrambótico ha tenido lugar en un pueblo de Granada, cuando un ladrón disfrazado de superhéroe ha llevado a cabo un robo con fuerza para solamente conseguir robar una botella de agua.

La Guardia Civil ha detenido a este hombre de 58 años como presunto autor de un delito de robo con fuerza en un bar de la localidad granadina de Castell de Ferro. Al local accedió disfrazado de Spiderman para evitar ser identificado. Una vez dentro, saltó la alarma, por lo que solo pudo robar una botella de agua antes de tener que huir.

La investigación, que corre a cuenta de la Guardia Civil de Castell de Ferro, ha consistido en una visualización de las grabaciones de las cámaras de seguridad del establecimiento y descubrieron el recorrido que había hecho este ladrón. Observaron que, además de resultar herido durante el robo, se había vestido de Spiderman.

Un Spiderman con antecedentes

El autor de los hechos tenía el objetivo de ocultar su identidad debajo de un disfraz de un popular superhéroe. Sin embargo, sus características físicas pusieron a los agentes tras la pista. Esto se debe, principalmente, a que ya había cometido diferentes hechos delictivos a lo largo de los últimos años y en algunos de ellos se había disfrazado también para no ser descubierto.

Lo localizaron y procedieron a su detención. Es en este momento cuando los agentes se dan cuenta de que el autor presentaba heridas que se correspondían con las que se había hecho durante el robo.

Otro robo con violencia

Ha sucedido otro hecho delictivo relacionado con robo en Guadix. La Guardia Civil ha detenido a un hombre de 32 años como presunto autor de dos delitos de robo con violencia en un mismo establecimiento con apenas dos días de diferencia. En el primer robo se llevó 150 euros y en el segundo 250.

Estos robos se ejecutaron con un destornillador, con el que se amenazó al dependiente. El trabajador se encontraba solo en ambas ocasiones. A través de la amenaza con la herramienta, se le amenazaba para que abriese la caja registradora.

De nuevo, la investigación por parte de la Guardia Civil gracias al visionado de las imágenes captadas por las cámaras de seguridad, identificaron al autor que, sin lugar a dudas para los agentes, ya había cometido otros crímenes de este tipo. Había sido detenido en múltiples ocasiones por los agentes.

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