El consejero de Presidencia, Administraciones Públicas e Interior, Elías Bendodo, el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, y el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, se reúnen este jueves para buscar una solución al brote de listeriosis, que ha afectado ya a 205 personas y ha dejado tres fallecidos y cinco abortos.
Así lo anunció Elías Bendodo este martes en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, en la que explicó que esta reunión se convoca "para trabajar codo con codo, como se viene haciendo en los últimos tiempos, y tener de forma coordinada una solución lo más inmediata posible al brote de listeriosis".
Por otro lado, la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social en funciones, María Luisa Carcedo, acudirá este jueves al Congreso, a petición propia, para dar cuenta de la gestión sobre el brote de listeria iniciado en Andalucía a finales de julio.
213 son los casos confirmados relacionados con el consumo de carne contaminada, tres personas han fallecido y se han producido seis abortos, uno en Madrid y cinco en Andalucía, donde residen la mayoría de afectados, ya que es de Sevilla la empresa cárnica, Magrudis, en la que se detectó la contaminación de alimentos, en particular de la marca "La Mechá".
La crisis sanitaria ha hecho que la Fiscalía Superior de Andalucía haya abierto una investigación penal para dirimir responsabilidades. Carcedo reconoció hace unos días que algo "ha fallado" al declararse el brote, pues España es uno de los países más "exigentes" y "rigurosos" con la seguridad alimentaria.
Para prevenir nuevos casos, el Servicio Andaluz de Salud ha puesto en marcha un protocolo. Van a llamar a todas las mujeres embarazas de la comunidad. "Las vamos a llamar directamente para decirles que les recomendamos tratamiento antibiótico con amoxicilina, un gramo cada ocho horas durante siete días", explicaba José Miguel Cisneros, portavoz de la Consejería de Salud.
Con dicho antibiótico ya han reducido en más de un 60% el número de ingresadas desde el pasado 22 de agosto. "Este antibiótico es seguro, no está contraindicado en el embarazo", añadía José Miguel Cisneros, aclarando en todo momento que la decisión final de aceptar o no dicho tratamiento es de las mujeres embarazadas afectadas.