El ertzaina fallecido, un acérrimo aficionado del Athletic con 30 años de servicio

Inocencio Alonso, el ertzaina fallecido tras sufrir un ataque al corazón durante los enfrentamiento en los aledaños de San Mamés, estuvo 13 horas trabajando este jueves. Llevaba más de 30 años en la Ertzainta y deja dos hijos, de 16 y 19 años.

En Ermua unas 300 personas le han recordado este viernes con un minuto de silencio.

Inocencio tenía 51 años y era un acérrimo aficionado del club bilbaíno de toda la vida. Iba a empezar una semana de vacaciones y preparaba una comida con sus amigos.

A través de Whatsapp mantuvo la última conversación con su amigo, el fotoperiodista Ignacio Pérez. Habían quedado en verse pero todo se truncó cuando Ignacio vio a un ertzaina tumbado en el suelo: "Estaba todavía consciente. Lo peor estaba por llegar".

Recuerda que Inocencio era "alegre, bonachón, un tío diez". Ese sentimiento es similar al del resto de vecinos de Ermua que hoy le han despedido.