Antonio Manuel Guerrero, el guardia civil condenado junto a otros cuatro amigos de 'La manada' a 9 años de prisión por abusos sexuales a una joven en los Sanfermines de 2016, ha dicho hoy estar "muy contento" de seguir libre y querer "estar tranquilo con mi hija".
La Audiencia de Navarra decidió mantener su libertad provisional rechazando la petición de la Fiscalía y las acusaciones de que volviera a prisión tras haber acudido a una comisaría de policía de Sevilla para preguntar por la renovación de su pasaporte, pese a tener prohibido salir de España y tener que entregarlo en los juzgados.
Guerrero, que ha acudido como el resto de condenados a los juzgados de Sevilla para firmar (las medidas cautelares de su auto de libertad provisional les exige comparecer todos los lunes, miércoles y viernes), ha confesado estar "muy contento" con la decisión de la Audiencia de Navarra que esperaba.
El guardia civil mantiene que acudió a la comisaría para preguntar qué tenía que hacer al no encontrar su pasaporte y creer que lo tenía caducado, ante el auto de libertad condicional que le exigía entregarlo en los juzgados, según recoge EFE.
Ha señalado que no va a emprender ninguna acción judicial después de que la Policía difundiera un tuit en el que hizo público que había acudido a la comisaría a renovarse el pasaporte -la Audiencia de Navarra afea a la Policía dicha actuación antes de informar al tribunal-, y ha asegurado que sólo quiere "estar tranquilo con su hija", nacida tras su primer vis a vis en prisión con su pareja.
Los primeros en acudir a firmar a los juzgados han sido José Ángel Prenda y el militar Alfonso Jesús Cabezuelo, tras los cuales ha comparecido Guerrero y finalmente Jesús Escudero y Ángel Boza, todos ellos por separado y sin hacer declaraciones a los medios.