Los padres de Juan no han encontrado en Ibiza un solo colegio público o concertado que garantice la enseñanza de su hijo de cuatro años en castellano y catalán a partes iguales. Por eso han demandado a la Consejería de Educación balear y piden que se investiguen los horarios y la lengua en la que se imparten las clases.
El Tribunal Superior de Justicia de Baleares ha admitido a trámite la demanda. Los padres creen que se está vulnerando su derecho a elegir la lengua en la educación del menor y subrayan que no se niegan a que el niño estudie catalán.