La red ferroviaria tradicional tiene 9.000 km y la escasez de recursos destinados a la misma es cada vez más patente. El caso más sonado es el de Extremadura, comunidad que posee 725 km sin electrificar. Un tren de Badajoz a Madrid tarda algo más de 6 horas y en muchos tramos no supera los 70 km/h, mientras que el mismo trayecto en coche no llega a las 4.
Sin embargo, Extremadura no es un caso aislado, comunidades como Andalucía o Galicia también sufren la deficiente situación de las infraestructuras y servicios. Un tren Sevilla-Almería tarda 6 horas, un recorrido de 412 kilómetros que en coche se haría en poco más de 4 horas. Lo mismo sucede en el trayecto de Coruña-Ferrol, en el que también se tarda más en tren que en coche.
Los 260 millones de euros destinados a redes de alta velocidad están hoy en el foco de la polémica. Las comunidades autónomas más afectadas reclaman más atención e inversión, necesaria para modernizar instalaciones y para mejorar el servicio que el pasado martes se puso en evidencia cuando 160 viajeros se quedaron tirados a oscuras y sin calefacción en un trayecto Badajoz-Madrid.