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La salud de los europeos

España, el país con los ciudadanos más sanos de la UE pese a estar a la cola en gasto

España está por debajo de la media europea en gasto sanitario, pero sus ciudadanos son los que mejor salud presentan y donde la esperanza de vida es más alta.

España dedica 3.002,73 euros per cápita en gasto sanitario, frente a los 2.935,15 euros en 2017, lo que supone una subida del 2,3 por ciento, según estima el informe 'Health at a Glance 2019: OECD Indicators', realizado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). Pese a este incremento, España se sitúa lejos de la media de la OCDE en inversión por persona en Sanidad, que está en 3.616 euros.

Según estos datos, España destina a gasto sanitario el 8,9 por ciento del PIB, teniendo en cuenta tanto inversión pública como privada. El informe apunta, no obstante, que Estados Unidos es el país que más dedicó a asistencia sanitaria en 2018, el equivalente al 16,9 por ciento del PIB, por encima de Suiza (12,2%).

Alemania, Francia, Suiza y Japón destinaron cerca del 11 por ciento del PIB, mientras que unos pocos países dedicaron menos del 6 por ciento de su PIB a asistencia sanitaria, entre ellos México, Letonia, Luxemburgo y Turquía, con el 4,2 por ciento.

Según las nuevas previsiones de la OCDE, el gasto en salud superará el crecimiento del PIB en los próximos 15 años en casi todos sus miembro. El gasto sanitario per cápita aumentará a una tasa promedio anual del 2,7 por ciento y alcanzará el 10,2 por ciento del PIB en 2030, frente al 8,8 por ciento en 2018. En España, se prevé que el gasto crezca un 9,9 por ciento.

Además de analizar la situación actual en salud, la OCDE también propone una serie de medidas para mejorar varios aspectos sanitarios. Por ejemplo, apuestan por aumentar el uso de genéricos, una propuesta que "podría reducir el gasto significativamente". "A pesar del progreso realizado en varios países, los genéricos solo representan aproximadamente la mitad del volumen de productos farmacéuticos que se venden en los países de la OCDE", aseguran.

Igualmente, proponen "desplazar" algunas tareas que desempeñan los médicos hacia los enfermeros y otros profesionales sanitarios para "aliviar las presiones de costos y mejorar la eficiencia". Según sus datos, los sistemas sanitarios y sociales emplean en la actualidad más trabajadores que nunca, y aproximadamente uno de cada diez empleos en los países de la OCDE pertenece al sector de la asistencia sanitaria o social.

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