Más de 20.000 jóvenes procedentes de diferentes puntos de España y Portugal han despedido el año estudiantil desde la Plaza Mayor de Salamanca en el 'Fin de Año Universitario', que hasta ahora se llamaba Nochevieja Universitaria, en un ambiente tranquilo y de alegría.
A las doce en punto de la noche han sonado las campanas del Ayuntamiento salmantino para una fiesta que se viene celebrando desde los años 90 y que comenzó de forma espontánea entre los estudiantes de la Universidad de Salamanca y, con el paso de los años, se ha convertido en una cita que aglutina a miles de jóvenes.
Al sonar las campanadas, los gritos, el bullicio y los cánticos se convirtieron en coro y los gorros rojos -que se reparten e imitan a los que llevaban los bucaneros- saltaron por los aires, mientras las uvas eran sustituidas, como ya viene siendo tradicional, por gominolas.
Apenas han quedado espacios libres en la Plaza Mayor de Salamanca, que tenía limitado su aforo a 21.700 personas por motivos de seguridad y, según fuentes policiales, hasta las doce la noche la tranquilidad ha sido la característica de esta fiesta.
Desde las seis y media de la tarde, las calles del centro de Salamanca se convirtieron en un constante peregrinar de jóvenes, muchos ataviados ya con el gorro de color rojo al más puro estilo bucanero. Con un frío intenso, un viento helador y una tarde poco halagüeña, el casco viejo de la ciudad, Patrimonio de la Humanidad, se iba llenando, al igual que muchos supermercados de esa zona, donde rápidamente se vaciaron las estanterías de comida rápidas o de bebidas alcohólicas.
Más de 40 autobuses han ido llegando, buscando el aparcamiento reservado para ellos en la Vaguada de la Palma, junto al río Tormes, y en el Paseo del Rector Esperabé. Vehículos desde toda España, de los que más de 20 han procedido de Madrid, además de Zamora, Valladolid, Santander, Sevilla, Cádiz o Granada, junto a otro que ha llegado lleno de estudiantes extranjeros que este curso disfrutan de una beca Erasmus en la capital gaditana.
Los más ruidosos, sobre las 20 horas, eran los estudiantes extranjeros, de becas Erasmus, que proceden de Portugal, además de Zaragoza y Cádiz.
Los controles policiales habían comenzado mucho antes, desde primeras horas de la mañana, en los que se podían ver patrullas caninas para la detección del consumo y tenencia de sustancias estupefacientes, así como de alcohol.
Este tipo de controles ha formado parte de la última práctica de un curso formativo de una semana que se desarrolla en Salamanca, en el que participan unidades caninas de 20 localidades españolas.
Además, la rigurosidad y las estrictas medidas prometidas por los sindicatos de la Policía Local se hicieron notar, sobre todo en los accesos a la Plaza Mayor salmantina. Han sido acciones "para garantizar la seguridad de los asistentes al 'Fin de año universitario' y de todos los salmantinos", como se afirmaba en un escrito de los tres sindicatos mayoritarios de la Policía Local de Salamanca, aunque las han hecho coincidir con medidas de protesta por cuestiones salariales y laborales.
Sobre las 19,30 horas las medidas de control alrededor de la Plaza Mayor ya eran muy estrictas, incluso se impedía entrar con mochilas y requisaban bolsas con bebidas alcohólicas.
La entrada en la Plaza Mayor discurrió de forma tranquila, sin incidentes, sin el alcohol en las manos, aunque ya se notaba que muchos jóvenes lo habían consumido previamente. Hasta la llegada de las doce de la noche, con las campanadas, han desfilado por el escenario el 'dj' Robert Morr, acompañado de Loka Flores, además de El Trinidad, Jacobo Ostos y Juanjo Martín, junto a la cantante de música 'house' Yasiris, así como Arkano y Bnet. Pasadas las doce y media, los jóvenes han comenzado a salir de la Plaza Mayor para continuar con la fiesta por bares de Salamanca.
