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MULTITUD DE PERIODISTAS Y PÚBLICO

Expectación en la Audiencia de Las Palmas en la lectura de la sentencia a Torres Baena

La sentencia no ha sido unánime, ya que el presidente del Tribunal no está de acuerdo con la absolución de Juan Luis Benítez.

El juez Emilio Moya ha tenido palabras de reconocimiento para las víctimas que denunciaron los hechos y para las familias. No es habitual que se lea una sentencia en audiencia pública, pero el caso merecía un tratamiento especial y la expectación era tremenda. Desde primera hora de la mañana, los medios de comunicación abarrotaban la entrada a los juzgados. En la sala había periodistas, público y familiares, algunos de ellos llorando.

El juez ha pedido a la Policía que esposara a a Ivonne González, a la que se le ha condenado a 126 años de cárcel y ha decretado su ingreso en prisión por riesgo de fuga. Su madre ha roto a llorar al ver esa imagen. Éste ha sido el momento de mayor expectación. Pero los términos que se han utilizado en esta sentencia sin precedentes han creado un ambiente de tensión continua.

Ivonne González y Juan Luis Benítez, el imputado que ha quedado en libertad, además de su abogada, han sido los únicos que han dejado aflorar sus sentimientos. Sin embargo, María José González y Fernando Torres Baena se han mantenido con la mirada fija y sin expresión.

Tanto acusados como abogados, prensa y público eran conscientes de la transendencia de este proceso. Fuera de la sala, ha quedado bastante patente que hoy se conocía la sentencia del caso más importante de abusos a menores del país.

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