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El agresor fue detenido
Las familias de dos menores denuncian acoso, amenazas y agresiones de otros escolares en un colegio de Alcorcón
Un adolescente de 16 años propinó un puñetazo a otro de 13, como consecuencia del golpe sufrió una fractura en la nariz. Tras este altercado el agresor fue detenido. Días después, el detenido, junto con otros dos compañero, amenazaron a la víctima cerca del recinto ferial de Alcorcón (Madrid). El caso se encuentra en manos de la Fiscalía de menores.
Las familias de dos menores de edad han denunciado a la Policía que sus hijas llevan sufriendo desde hace varias semanas situaciones de acoso, amenazas y una agresión física por parte de un grupo de escolares de un colegio de Alcorcón, han confirmado fuentes policiales.
Todo comenzó el pasado 11 de diciembre de 2017, sobre las 14.30 horas, cuando después de clase dos chicos de 13 años que iban andando por la avenida del Oeste de Alcorcón se toparon con otro, de 16 años, que tras un altercado, propinó un puñetazo a uno de los primeros. Como consecuencia del golpe, sufrió una fractura en la nariz.
La víctima y su familia interpusieron una denuncia por lo ocurrido el 19 de diciembre y ese mismo día el agresor fue detenido. El pasado miércoles 24 de enero, también a las 14.30 horas, el menor detenido junto a otros dos amenazaron al denunciante cerca del recinto ferial de Alcorcón. La víctima llamó de nuevo a la Policía, que filió a los tres amenazantes y trasladó el caso a la Fiscalía de Menores.
De hecho, el fiscal de Menores ha tomado declaración al agredido, que ha ratificado los hechos. Esta misma semana está previsto que interrogue también al supuesto atacante. Mientras tanto, los padres de los niños amenazados les acompañan todos los días a la entrada y salida de instituto El Pinar para evitar que se repitan esos episodios.
La Policía patrulla con más intensidad esta zona de colegios. Los amenazantes estudian en el cercano IES Jorge Guillén. Tanto los institutos como la Consejería de Educación de la Comunidad han señalado que todo se ha producido fuera de los recintos escolares, por lo que no tienen información del asunto, que está en manos de la Fiscalía de Menores.
Cuando los supuestos casos se producen dentro de los centros, el Gobierno regional activa un protocolo para determinar si se trata de acoso escolar. Se pone en manos de la Inspección Educativa y en la parte de instrucción, se consulta a las partes implicadas, profesores, alumnos e incluso a las familias.
Después de la investigación, Educación decide si se adopta alguna medida cautelar, como separar de centro a los menores implicados. Además, los colegios tienen a su disposición a la Unidad Especializada de Convivencia, que aborda casos de acoso escolar, y que cuenta con expertos que pueden ayudar.
Por su parte, desde la Policía municipal han señalado que no tienen conocimiento del asunto ni por medio de la denuncia ni por los servicios ordinarios de petición y/o información general del Ayuntamiento, ni a través de los cauces necesarios establecidos por el ayuntamiento para detección de casos de acoso escolar y/o a menores.
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