Graduación
Una graduación muy emotiva: los padres recogen el título de su hija fallecida por una negligencia médica
Los padres acuden a la ceremonia de graduación de su hija que había fallecido anteriormente por un error tardío en su enfermedad. Los compañeros de Nerea quisieron darle un regalo a los padres.
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El acto de graduación del IES Botánico de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) ha sido muy especial. Los padres de Nerea, una joven estudiante que falleció por una presunta negligencia médica, acudieron al evento para recoger su título.
"Ella tenía que graduarse en un día como hoy, pero por desgracias de la vida no está con nosotros. Queremos hacerle entrega a sus padres de lo que a ella le correspondería. ¿Pueden subir los padres de Nerea, por favor?", dice la directora del centro en la ceremonia de graduación del instituto, que arranca un fuerte aplauso de los presentes.
Al escenario subieron Plácido y Caridad, los padres de Nerea, que falleció el pasado 13 de marzo por una presunta negligencia médica. Durante la graduación los padres, alumnos y profesores quisieron recordar a la adolescente con una emoción compartida.
Los compañeros de Nerea tuvieron otro detalle con la familia y le entregaron una camiseta firmada por todos los compañeros. Al subir, el padre señaló al cielo en señal de recuerdo de su hija, le lanzó un beso. Los alumnos y compañeros de la menor, que seguían aplaudiendo, se pusieron en pie para rendirle homenaje.
"Le vamos a hacer entrega de una camiseta que todos sus compañeros han querido firmar. Para que la tengáis de recuerdo", continúa diciendo la presentadora. La madre se secaba las lágrimas y su pareja le abrazaba. Sin duda, uno de los momentos más emotivos de la graduación de este año. "Muchas gracias a todos", dice el padre llevándose la mano al corazón. "Gracias a ellos por querer venir un día como hoy", añade la directora.
Creyeron -erróneamente- que se había drogado
La joven falleció el pasado mes de marzo y los padres describieron su deceso como una "cadena de errores médicos". Comenzó a encontrarse mal, con fiebre, rigidez en el cuello y dificultades para comunicarse. Acudió al hospital Virgen del Camino, donde los médicos pensaron que se había drogado, pero las pruebas dieron negativas.
Posteriormente fue trasladada al hospital Puerta del Mar donde se diagnosticó su enfermedad: la adolescente padecía meningitis meningocócica, una enfermedad grave si no se recibe tratamiento rápidamente.
Los padres de la menor aseguran que el diagnóstico médico fue lento y que esa tardanza en detectar qué le ocurría a Nerea tuvo un desenlace fatal a pesar de que estaba vacunada contra la enfermedad.
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