Granizo
El granizo que provocó la muerte de una bebé de 20 meses cayó desde 20 kilómetros y a casi 100 km/hora
La pasada madrugada, una de las enormes bolas de granizo, que cayó desde 20 kilómetros, causó la muerte de una bebé de 20 meses. Este acontecimiento se ha convertido en la primera muerte en Europa a causa de este fenómeno meteorológico desde 1997.
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La agresiva tormenta de granizo que acabó la pasada madrugada con la vida de una bebé de 20 meses ha dejado casi 70 heridos, además de incontables daños materiales. Las enormes bolas de hielo cayeron desde 20 kilómetros a una velocidad de más o menos 100 kilómetros por hora.
Esta muerte causada por dicho fenómeno meteorológico, que tuvo lugar en el municipio de La Bisbal d'Empordà (Girona), ya es el primero registrado en Europa desde 1997. Las grandes piezas de granizo cayeron casi a 100 kilómetros por hora desde 20 kilómetros y acabaron con la vida de esta bebé, que se encontraba con su padre jugando en el patio de casa. Hace al menos 20 años que una tormenta de granizo de tales dimensiones no se registraba en la zona.
La dimensión de las bolas de hielo alcanzaron entre 10 y 11 centímetros, registradas por última vez en 2002 en Cataluña. "La tormenta que provocó la granizada llegó a tener 20 km de altura, algo muy infrecuente en nuestras latitudes, y se formó por la convergencia de viento originada por el frente de racha de una tormenta procedente del sur de Francia y el viento del sudeste de origen marítimo", según ha informado el Servicio Meteorológico de Cataluña.
¿Qué consecuencias ha traído este fenómeno meteorológico?
Además de la trágica muerte de una bebé de 20 meses tras recibir el impacto de una bola de hielo en la cabeza, que le causó un traumatismo del que no pudo recuperarse en el Hospital Universitario Doctor Josep Trueta de Girona, al que fue trasladada, el número de daños materiales es elevado.
El Ayuntamiento de La Bisbal y el consejo comarcal del Baix Empordà han anunciado que se harán cargo de los gastos del funeral de la pequeña. En el día de mañana, este municipio guardará un minuto de silencio en memoria de la pequeña. Además del fallecimiento de la niña, las autoridades han calificado la situación de "catastrófica". El número de heridos asciende a 67, y centenares de vehículos se encuentran dañados. También el granizo ha causado múltiples destrozos en edificios públicos y viviendas particulares, así como estragos en cultivos.
Entre las personas lesionadas, una mujer resultó herida grave y fue trasladada al Hospital Josep Trueta, mientras que otras 35 fueron atendidas en el servicio de Urgencias del Hospital de Palamós. Por otro lado, 32 de ellas recibieron asistencia médica en el Centro de Atención Primaria (CAP) de La Bisbal, el cual se vio desbordado.
Precisamente, el CAP fue uno de los edificios más afectados en esta población, en el que los cristales de las claraboyas se rompieron, por lo que han tenido que ser tapados desde el tejado con unas lonas. Otro de los edificios municipales más afectados ha sido el Museo de Terracota, que ha sufrido grandes desperfectos en su cubierta. También el Ayuntamiento de La Bisbal se vio afectado, el granizo rompió la claraboya e impactó contra una cristalera de colores.
Los Bomberos han trabajado toda la mañana con camiones equipados con escaleras para asegurar los tejados y el cableado de las calles, debido a que muchas tejas y cornisas de inmuebles salieron despedidas a causa de la tormenta de granizo.
El ayuntamiento del municipio se está planteando pedir que la zona sea declarada zona catastrófica. En todo caso, la Generalitat abrirá una línea de ayudas de emergencias para los municipios afectados, tal y como ha avanzado la consellera de Presidencia, Laura Vilagrà, en una rueda de prensa.
El jefe del grupo de predicción y vigilancia de la AEMET en Cataluña, Ramon Pascual, ha recordado que "el granizo de gran tamaño ha existido siempre" y que, en 1960, Osona ya fue declarada zona catastrófica por una gran tormenta con granizo de casi 500 gramos de peso.
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