Agentes de la Guardia Civil de Algeciras se han lanzado al mar en las inmediaciones de la playa de Bolonia, en Tarifa (Cádiz), y han rescatado a una treintena de inmigrantes, en su mayoría menores, que había quedado a la deriva, uno de ellos a punto de ahogarse, según ha informado el instituto armado.
El rescate se ha producido poco después de las 7:00 horas de esta mañana, cuando se recibió el avisó de la posible llegada de una patera con una treintena de inmigrantes a la zona denominada playa de Los Alemanes, en Tarifa. La embarcación era seguida de cerca por Salvamento Marítimo (SALVAMAR), pero aparentemente hacía caso omiso a sus señales y seguía navegando rumbo a Punta Camarinal.
Varias patrullas de la Guardia Civil establecieron un dispositivo en tierra y vieron como cuando la embarcación estaba a 50 metros de costa el patrón se lanzaba al agua seguido de otras cuatro personas más. La embarcación quedó a la deriva con grave riesgo de naufragio quedando a bordo unas 30 personas, en su mayoría menores.
El presunto patrón y uno de los inmigrantes consiguieron alcanzar a nado la costa y huir a pie por una zona rocosa, lo que complicó su persecución. De los otras tres personas que se tiraron al agua, dos de ellas consiguieron aferrarse a una roca a unos diez metros de la zona segura del acantilado. Uno de ellos no consiguió llegar a tierra y se hundió en el mar, desapareciendo bajo las aguas.
Los agentes de una de las patrulla perteneciente al Puesto de Torreplata se lanzaron al agua y uno de ellos consiguió salvar a la persona hundida, mientras que el otro nadó hacia la embarcación para evitar su "más que posible hundimiento", ya que estaba a la deriva. El agente logró liberar la cuerda que se había enrollado a la hélice del motor y que éste funcionara, tras lo que pudo acercar la patera a la embarcación de Salvamento Marítimo, que observaba la escena desde la distancia, ya que no podía acercarse por el peligro de embarrancar.
La embarcación fue finalmente remolcada y traslada junto con los 34 inmigrantes y el Guardia Civil que la rescató al puerto de Barbate, donde fueron atendidos por efectivos de la Comandancia de Cádiz. El agente que auxilió al inmigrante que estaba hundido en el agua tuvo problemas para llegar a costa debido a que la resaca y el fuerte oleaje lo estrellaban repetidamente contra las rocas, por lo que un tercer Guardia Civil se lanzó al agua para ayudarle, y entre ambos lograron llevar al inmigrante a tierra.
Estos dos agentes, al igual que el que se lanzó al mar para alcanzar la patera a la deriva, tuvieron que ser atendidos en un centro sanitario por lesiones y cortes leves debidos al fuerte embate de las olas contra las rocas. Mientras, otros agentes en tierra emprendieron la búsqueda del patrón y del inmigrante que habían alcanzado tierra firme, aunque sólo pudieron interceptar escondido a este último.
La Asociación Unificada de la Guardia Civil ha dado la enhorabuena a los agentes que han participado en este peligroso rescate y han pedido que sea reconocido "debidamente el riesgo que han corrido estos grandes profesionales".
