El pequeño que cayó el domingo a un pozo en una finca de la localidad malagueña de Totalán tuvo un hermano que falleció a los tres años, según han podido confirmar fuentes de la familia a Antena 3 Noticias. Oliver murió en mayo de 2017 cuando Julen tenía meses de edad.
Mientras, los equipos de rescate han logrado sacar algo de tierra del pozo, aunque se han topado con una "zona dura" que complica las tareas. La subdelegada del Gobierno en Málaga, María Gámez, ha dicho a los periodistas que el dispositivo de rescate trabaja desde el sábado "sin descanso" y que el trabajo es "técnicamente muy complicado", por lo que se analizan "todas las alternativas posibles para acceder, localizar y rescatar" al pequeño.
En las últimas horas, los efectivos han hallado una bolsa de chucherías y también han extraído un vaso del pozo, de unos 25 centímetros de diámetro y 110 metros de profundidad, aunque por ahora no se ha obtenido ninguna imagen que constate la presencia del niño. "Nadie está preparado exactamente para un rescate en estas condiciones", ha señalado Gámez, quien ha explicado que no se trata solo de llegar hasta el fondo del pozo sino de "conservar el hueco por donde se debe rescatar", por lo que no se desecha ninguna alternativa.