Sucesos
Un hombre pakistaní que había vivido con las hermanas, principal sospechoso del crimen de Morata de Tajuña
El hombre agredió con el martillo a las mujeres tiempo atrás, motivo por el que entró en prisión. La Policía cree que podría haber cometido el triple asesinato aprovechando un permiso carcelario
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La Policía ya tiene un sospechoso principal del triple crimen de Morata de Tajuña en el que tres hermanos (dos mujeres y un hombre) fueron ayer hallados muertos en su casa con signos de violencia. Se trata de un hombre de origen pakistaní que vivió de alquiler con los tres familiares.
El hombre fue condenado a prisión por intento de homicidio tras agredir con un martillo a las dos mujeres después de que éstas, según la Policía, intentasen robarle dinero. Según sospecha la Guardia Civil, durante las 48 horas que estaba en libertad podría haberse acercado a la vivienda a terminar el trabajo.
Asimismo, según vecinos y familiares, en las últimas horas ha trascendido que las hermanas se habían enamorado de unos supuestos militares estadounidenses a los que ellas les estaban prestando muchísimo dinero. Estos hombres que decían ser militares les decían que se encontraban en una operación viviendo en Afganistán.
Relación con supuestos militares
Durante años estuvieron pidiendo dinero a estas mujeres apelando al enamoramiento que tenían ambas. Una de las mujeres inició una relación a distancia con uno de los llamados militares y la otra hermana la inició posteriormente con el asistente del militar. Muchos les advirtieron que esta relación era un fraude. Habían pedido dinero a algunos vecinos para dárselo a estos militares en Afganistán.
Fuentes de la investigación detallan a Antena 3 Noticias que detrás de esos supuestos militares , realmente se encontraba una red de delincuentes que se habría aprovechado de estas dos mujeres para sacarles todo el dinero que han podido y manipularlas.
El ataque tuvo lugar en el domicilio en el que vivían los tres hermanos. Fueron los vecinos quienes dieron la voz de alarma después de semanas sin verle por el pueblo. Los tres cuerpos aparecieron con signos de violencia, apilados y parcialmente quemados.
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