Identificada la 'mujer del cobertizo' casi seis años después: Ainoha Izaga, una joven paraguaya de 33 años que hallaron colgada en un gallinero

En un municipio de apenas 4000 habitantes de la comarca del Gironés, encontraron a un cuerpo sin vida en el interior de una nave. Los perros de un vecino hallaron a una mujer que nunca antes habían visto en el pueblo. Tenía un tatuaje en su brazo muy característico, que pensaban que sería clave para su identificación.

Hace más de un lustro, concretamente el 4 de agosto de 2018, en el barrio de Olivars de Sant Julià de Ramis en Girona, un hombre escuchó como sus perros ladraban muy fuerte. Los siguió y le llevaron a un gallinero "que tenía la puerta medio abierta, y de reojo vi un cuerpo", relataba en la Cadena Ser, Manuel Mármol, la persona que encontró el cuerpo. Aunque se desconoce el motivo, todo parece indicar que la víctima se suicidó ya que estaba colgada y no tenía signos de violencia.

Se trataba de una mujer de piel blanca, pelo rubio y ojos castaños, estaba colgada en el cobertizo, pero nadie la conocía. Vestía vaqueros negros, camisa de mangas largas de rayas y unas zapatillas Nike negras. No llevaba ningún tipo de identificación y los tres residentes de la casa a la que pertenecía el gallinero nunca la habían visto. Aunque tenía tatuado en su brazo izquierdo la palabra 'éxito' en hebrero.

Los residentes, dos hermanos y la pareja de uno de ellos, desconocían el motivo de que la mujer estuviera colgada en el gallinero. La cuerda era para sujetar el comedero de las gallinas y un cubo. Según el forense la mujer murió seis horas antes de hallar su cuerpo.

Intervención de la Interpol

Ante la falta de datos, el caso quedó cerrado sin identificar a la víctima al no hallar la autopsia signos de criminalidad. Pero la Policía Nacional y los Mossos d'Esquadra continuaron con la investigación para conocer a quien pertenecía el cuerpo sin vida de 'la mujer del cobertizo', conocida así mediáticamente. Hace seis meses la Interpol se unió al proceso.

Gracias a establecerse una coincidencia de las huellas dactilares en las bases de la policía de España y Paraguay se ha podido identificar el cadáver encontrado colgado en el cobertizo y que está enterrado en una fosa común del cementerio de Girona. Se trata de Ainoha Izaga Ibieta Lima, una joven de 33 años de Paraguay. Ahora las autoridades podrán contactar con los familiares para que el cuerpo pueda ser trasladado.

La intervención del organismo ha sido clave para dar con el paradero de la mujer casi seis años después. Pidió ayuda a la ciudadanía para identificar 46 muertes violentas a mujeres de toda Europa, de las que cuatro de ellas habían sido encontradas en Cataluña.

Ainoha se trasladó a España en 2012, y su hermano en Paraguay había denunciado su desaparición a mediados de 2019. La identificación del cuerpo ha sido posible gracias al programa 'Identify Me' de la Interpol en el que colaboran las autoridades españolas.

La Policía Nacional ha agradecido a través de 'X' la colaboración con los Mossos y la coordinación de Interpol: "Gracias al trabajo de la Sección de Homicidios y Desaparecidos de la UDEV Central de la Comisaría general de Policía Judicial, 'la mujer del cobertizo' ha podido ser identificada".

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