Los incendios forestales registrados en los últimos días en Galicia, especialmente en la provincia de Ourense, han arrasado más de 6.000 hectáreas, en un aciago otoño para los montes de la Comunidad, con muy altas temperaturas para esta época del año.
Después de un intenso fin de semana de lucha contra el fuego, la Xunta ha informado de que desde el pasado viernes se han registrado unos 400 incendios y ha calculado, en una primera estimación, que han quemado más de 6.000 hectáreas, si bien este número podría ser superior, ya que en las últimas jornadas también se han registrado numerosos fuegos de menor dimensión.
A última hora de la tarde, el incendio más grave es el que afecta desde el jueves a Manzaneda (Ourense), cerca de la Serra do Invernadeiro, pues aunque la Xunta apunta que no hay constancia de que afecte al parque natural, la zona es de gran pendiente y se ha extendido a los ayuntamientos de Chandrexa de Queixa y Vilariño de Conso, quemando en su conjunto más de 1.460 hectáreas.
También es de gravedad el fuego de Lobios (Ourense), municipio fronterizo con Portugal, donde se encuentra el parque natural del Xurés, y que afecta a unas mil hectáreas.
De ochocientas hectáreas es el de Maceda (Ourense), también activo, por lo que estos fuegos han sido calificados como Gran Incendio Forestal, al superar las 500 hectáreas.
Asimismo se suman, en esta provincia, los de Viana do Bolo (400 hectáreas), Maceda (250), Avión (228), Peroxa (200), Montederramo (200), Riós (200), Esgos (150) o Gudiña (150). En Lugo también hay fuegos en montes de Carballedo (40), Palas de Rei (25), y otro ya controlado en Vilalba (200).
El conselleiro de Medio Rural de la Xunta, Samuel Juárez, ha reprochado al Gobierno que no haya puesto en marcha todavía un "dispositivo excepcional" para investigar los incendios forestales registrados el pasado fin de semana y ha destacado que el 90 por ciento de los incendios que se han producido este fin de semana han sido provocados.
Por su parte, la ministra de Defensa, Carme Chacón, ha precisado que ahora mismo su Ministerio tiene "más de 400 efectivos desplegados" en Galicia para ayudar a controlar los incendios y que "desgraciadamente, las altas temperaturas parece que van a continuar igual".
