Salvamento Marítimo, dependiente del Ministerio de Fomento, inicia este jueves las operaciones de descontaminación del petrolero Woodford, hundido en 1937 en la Guerra Civil, con el propósito de eliminar una fuente de contaminación constante, que podría agravarse con el paso del tiempo y evitar un grave riesgo ambiental para el mar Mediterráneo y el ecosistema de las islas Columbretes en el caso de producirse una fuga importante del hidrocarburo contenido en los tanques. Para llevar a cabo esta tarea de rescate y prevención, Salvamento Marítimo ha activado un dispositivo que incluye las más modernas técnicas de buceo en saturación así como medidas preventivas de seguridad y de lucha contra la contaminación.
El petrolero, de 129,7 m de eslora y 17,4 m de manga, fue construido en 1914 en el astillero Sir James Laing & Sons Ltd. en Sunderland, Reino Unido, con el nombre de “San Joaquín”, entonces perteneciente a la Compañía Noruega WILH. WILHELMSEN, ASA. Con el nombre de Woodford y bandera inglesa, el petrolero se hundió en aguas deCastellón el 1 de septiembre de 1937, en el transcurso de la Guerra Civil, cuando se dirigía a puerto español. Impactado por dos torpedos procedentes del submarino italiano Diaspro en su sección media, a la altura de los tanques 5 y 6 por su costado de estribor.
En el hundimiento falleció un tripulante, el segundo maquinista, y el resto de la tripulación (32 hombres) pudo ponerse a salvo. Según testimonios de los supervivientes el buque fue alcanzado en dos tanques y antes de hundirse estuvo ardiendo. Los botes salvavidas quedaron manchados de fuel, lo que prueba que hubo un derrame de hidrocarburo en el medio marino en el momento del hundimiento. El buque se encuentra hundido a 80 metros de profundidad, está posado sobre el costado de estribor, a 40 millas náuticas al nordeste de Castellón y a 15 millas náuticas al norte del Parque Natural de las Islas Columbretes.
Salvamento Marítimo ha realizado operaciones de inspección y vigilancia en la zona del hundimiento. Las operaciones de vigilancia se han realizado con medios marítimos y aéreos para monitorizar la zona del hundimiento. Las operaciones de inspección submarina se han llevado acabo con el fin de estudiar la viabilidad de las operaciones de extracción. Se ha constatado que el Woodford es el origen de episodios periódicos de contaminación que afectan a la zona.
Así pues, las inspecciones submarinas en el pecio realizadas hasta la fecha por parte deSalvamento Marítimo han permitido comprobar que las manchas detectadas en superficie provienen del Woodford, que existen fugas que vierten hidrocarburo de forma continua, que el producto en los tanques es un fuel ligero fácilmente bombeable, y que la cantidad total estimada de hidrocarburo en el pecio oscila en torno a 1.000 m3. Además, el espesor de la chapa del barco hace viable la extracción del hidrocarburo.
Sin embargo, la profundidad a la que se encuentra el barco exige que las operaciones de extracción tengan que realizarse mediante la técnica de buceo en saturación que permite mantener turnos de trabajo de 8 horas a 80 metros de profundidad, por no ser suficiente el tiempo de permanencia en el pecio de los buzos mediante la campana húmeda.