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ENTREVISTA CON ANTENA 3 NOTICIAS

Jimena, la joven española desaparecida con su novia: "Estoy cansada, psicológica y físicamente"

María Jimena y su novia egipcia, Shaza Ismail, ya están en España y están en buen estado de salud, aunque siguen algo aturdidas tras la pesadilla que han sufrido los últimos días. Reconocen que están psicológicamente cansadas pero se encuentran bien, "deseando llegar a Málaga".

María Jimena y su novia egipcia, Shaza Ismail, ya están en España y están en buen estado de salud, aunque siguen algo aturdidas tras la pesadilla que han sufrido los últimos días.

Llegaron el viernes al aeropuerto de Barcelona tras ser deportadas y ya se encuentran de camino a Málaga para estar con la familia de Jimena. Su madre, Teresa Montero, ha explicado que una amiga de su hija se desplazó hasta Barcelona para encargarse de su regreso a casa.

La joven española ha reconocido que está cansada física y psicológicamente pero "deseando llegar a Málaga". "Psicológicamente bastante aturdida pero estoy bien", ha indicado.

Además ha contado que su novia Shaza esta "en shock", ya que "tampoco habla español y no entiende nada". "Su familia ha intentado comunicarse con ella pero esta bien", asegura.

María y Shaza intentaron volar la semana pasada desde Dubái (Emiratos Árabes Unidos), donde residen los padres de la egipcia, a Londres, con escala en Tiflis (Georgia). Al parecer, el padre de Shaza las había denunciado ante las autoridades de los Emiratos Árabes Unidos por su relación homosexual. Cuando querían seguir su viaje a Londres, fueron interceptadas en el aeropuerto de Tiflis por el padre de Shaza, junto a una abogada, para impedir que su hija saliera hacia Georgia.

En un altercado, el padre destruyó el pasaporte de Rico, pero las dos jóvenes lograron escapar y cruzaron a pie la frontera hacia Turquía y allí tomaron un autobús hasta Samsun, en la costa del Mar Negro, donde la Policía turca les detuvo al entrar sin documentación en el país. Tras doce horas de arresto fueron puestas en libertad y viajaron en autobús hasta Estambul, donde fueron detenidas de nuevo por la policía turca y llevadas a un centro de deportación.

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