Barcelona

Josep María Mainat, en el juicio contra su expareja: "Me cuesta mucho aceptar que pretendiera asesinarme"

"Si este tribunal la condena va a ser uno de los días más tristes de mi vida", ha afirmado en la Audiencia de Barcelona.

Josep María Mainat, productor audiovisual

Josep María Mainat, productor audiovisualEFE

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"Me cuesta mucho aceptar que pretendiera asesinarme, después de 10 años, pero tengo unas lagunas que quiero aclarar", han sido las contundentes palabras del productor audiovisual Josep Maria Mainat durante la primera sesión del juicio a su expareja, Ángela Dobrowolski, acusada de asesinato en grado de tentativa y de revelación de secretos, por lo que se piden para ella 16 años de cárcel.

Mainat se ha mostrado compasivo en la sala, y ha asegurado ante el tribunal de la sección 20 de la Audiencia de Barcelona que "si la condenan, será uno de los días más triste de mi vida", a lo que ha añadido "no pienso que habré ganado, pienso que habré perdido".

Dobrowolsky, quien ha comparecido con un nuevo cambio de look -como ya nos viene acostumbrando- de pelo rapado y teñido de rosa, está acusada de intentar matarlo inyectándole insulina al enterarse de que él quería divorciarse y quedaba relegada de la herencia. Esta información la habría obtenido presuntamente al espiarle información en el ordenador del productor. Ella ha llegado desde el centro penitenciario de Brians 2, en el que está interna desde el viernes tras intentar fugarse con escasas probabilidades de éxito en la cárcel de Wad-Ras.

El productor ha intentado buscar una explicación a los hechos. "Su cabeza no está en su sitio. Ha hecho cosas muy absurdas en este tiempo. Pero igual ella pensó que era lo mejor. Quiero pensar que se arrepintió e intentó solucionarlo, pero no lo sé", ha expresado ante la sala.

"Si la condenan, será uno de los días más triste de mi vida"

Josep María Mainat, productor audiovisual

Sobre su posible condena, Mainat se ha mostrado incrédulo sobre la posibilidad de que se puedan confirmar los delitos que se le acusan: "Me gustaría que no fuera condenada porque en este juicio se demostrará que no había intentado asesinarme, pero si quería hacerlo, que se le condene", ha declarado, cabizbajo. También ha explicado cómo ocurrió todo: "Recuerdo que me despierta hacia las dos de la madrugada, yo estaba totalmente dormido, y me dijo: 'te voy a poner dos inyecciones más'. Le contesté: 'no hace falta, estoy descansando, y ella dijo: 'sí, sí, te las voy a poner'.

La acusada declarará después de los testigos y la práctica de las pruebas. La fiscalía reclama para ella 16 años de cárcel, 13 por intento de asesinato y tres por revelación de secretos, de probarse que hubiera entrado en el correo electrónico de su exmarido. La acusación particular pide dos años menos de pena. Por su parte, la defensa solicita la absolución de su clienta o, de haber condena, seis meses de prisión por una presunta imprudencia, al haber proporcionado a su exmarido una medicación sin ser personal cualificado para ello.

Este martes, en la segunda sesión del juicio está previsto que declaren los testigos, entre ellos empleados de hogar y el personal médico que atendió a Mainat cuando cayó en coma tras la inyección de insulina, además de los Mossos d'Esquadra.

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