Agresión Malasaña
Un juez abre una investigación penal contra el joven que se inventó la agresión homófoba de Malasaña
El joven denunció que le habían atacado ocho encapuchados en el portal de su casa y al final confesó que las lesiones habían sido consentidas. Ahora se enfrenta a una investigación penal.
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El Juzgado de Instrucción número 52 de Madrid ha abierto una investigación penal contra el chico de 20 años que se inventó la agresión homófoba de Malasaña. El joven denunció que le habían atacado ocho encapuchados en el portal de su casa y al final confesó que las lesiones habían sido consentidas.
Esa falsa agresión provocó un terremoto político y ahora podría enfrentarse a una multa de entre 6 meses y un año por simulación de delito.
El magistrado David Suárez, que fue el que inicialmente recibió el parte de lesiones tras la presunta agresión al joven, ha recibido recientemente el atestado policial con su declaración posterior, en la que reconocía que fueron lesiones consentidas, y ha decidido abrir diligencias en este sentido.
El joven habría simulado un delito, lo que contempla una multa de seis a doce meses de cárcel para la persona que, ante algún funcionario, "simulare ser responsable o víctima de una infracción penal o denunciare una inexistente, provocando actuaciones procesales", según consta en el artículo 457 del Código Penal, contempla
Es diferente a la infracción de denuncia falsa, ya que esta directamente señala o culpa de un delito a una persona o personas concretas.
Una vez iniciada la investigación, el juez informará a las partes para que se pronuncien, entre ellas a la Fiscalía, que por el momento no ha recibido el atestado policial de este caso.
La Policía Nacional envió la semana pasada el atestado completo de la investigación sobre el joven. Todo comenzó con su denuncia, en la que aseguraba haber sido agredido en el barrio madrileño de Malasaña por ser homosexual.
Tras varias horas de interrogatorio, el chico finalmente se desmoronó y admitió que las heridas fueron consentidas mientras mantenía relaciones sadomasoquistas con otras dos personas, con las que contactó por redes sociales, en otra vivienda, detallaron fuentes de la investigación.
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