El 70% de la población española ha estrenado este lunes la fase 2 de la desescalada, mientras que un 30% permanece en la fase 1. Por su parte, las 45.000 personas que viven en las islas de Formentera, La Gomera, El Hierro y La Graciosa han pasado hoy a la fase 3.
Entre las principales novedades de la fase 2 destaca la eliminación de las franjas horarias, excepto para las personas mayores que deberán mantener un horario de paseo. Además, se amplia el número de personas que pueden reunirse hasta un total de 15 y se permiten las visitas a familiares en residencias de mayores. A todo ello se añade la apertura de playas y piscinas.
Las playas que este lunes inician la temporada estival persiguen el objetivo de conseguir sus arenales en playas seguras de coronavirus. Las estrategias que han elegido los ayuntamientos para vigilar el aforo y que se cumplan las medidas de distanciamiento van desde el uso de drones a un refuerzo de vigilantes de la playa que se dediquen a esta labor.
La mayoría de las playas españolas habilitarán zonas de entrada y salida para facilitar la distancia social. Muchos ayuntamiento han comenzado también a realizar campañas informativas sobre las precauciones que deben seguir los bañistas y sobre las medidas que toma para garantizar la seguridad en las playas.
En el terreno de la restauración, la fase dos también permite el consumo dentro de los locales con servicio de mesa y siempre sentados. Asimismo, los centros comerciales también podrán reabrir con un aforo limitado al 30% de sus zonas comunes y al 40% en cada uno de los establecimientos comerciales.
Los hoteles podrán abrir para consumo en el local, siempre que no se supere un 40% de su aforo.
