La crisis migratoria, que ha obligado a reforzar las fronteras de Ceuta y Melilla y los centros de internamiento de extranjeros con más unidades policiales, y los permisos a los agentes han mermado el despliegue policial en Cataluña, según han indicado fuentes conocedoras del dispositivo.
A estas dos circunstancias se ha unido también la normalidad con la que se está aplicando el artículo 155 de la Constitución que, hasta ahora, no está dando lugar a protestas violentas ni a situaciones de inseguridad.
Ante esta situación, se han favorecido los permisos para viajar a casa y, así, algunos agentes, que han estado más de 50 días sin relevo, han podido disfrutar de quince días de descanso.
Sin embargo, desde la frontera de Ceuta, las fuerzas de seguridad piden que se incremente la presencia de agentes en un 25%.
El buen tiempo y la proliferación de las mafias han incrementado la llegada de pateras a nuestras costas. Hasta octubre de este año, Salvamento Marítimo ha rescatado un total de 824 embarcaciones, lo que supone el doble que en el año 2016.
Según estos datos, los equipos de emergencias rescatan a un inmigrante cada media hora en las costas de nuestro país.