Después de 3 meses cerrados, bares y restaurantes de Cantabria vuelven a reabrir sus interiores a partir de hoy. Hasta ahora solo podían prestar servicio en sus terrazas.
El pasado noviembre, el Gobierno autonómico decretó la restricción para evitar la propagación de contagios por coronavirus. Tras más de 90 días, los hosteleros ya pueden recibir clientes en el interior de los establecimientos, aunque con aforo reducido al 33%.
El aforo en interior no podrá superar el tercio de su capacidad
La decisión ha supuesto un alivio, sin embargo los restauradores consideran esta medida insuficiente para hacer frente a la crisis de la pandemia. El sector denuncia la enorme caída de ingresos que acumulan desde hace un año. Por ello piden un aforo más amplio o poder cerrar más tarde. De momento, se mantiene el toque de queda a las 22:00 horas y el número máximo de 6 personas en las reuniones sociales.
Los casinos, salones de juego o de apuestas también podrán volver a la actividad con un tercio de su capacidad y respetando todos los protocolos sanitarios; ventilación, distancia de seguridad y medidas de higiene.
¿Qué pasará con Semana Santa?
El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha confirmado que debe existir un consenso entre todas las regiones de cara a Semana Santa: "O todos o ninguno, sería un desastre que cada comunidad tomase una medida. Con que haya 4 ó 5 comunidades que tengan malos datos y empiece a haber movilidad ya está el lío extendido por todo el país".
Galicia, Asturias, Castilla y León, Comunidad Valenciana o Murcia apuestan por el cierre perimetral para evitar el repunte de contagios.