Este miércoles la Policía Nacional detuvo a un joven marroquí que residía en Sevilla y que habría planeado atentar este Miércoles Santo en la capital hispalense.
El joven de 23 años era estudiante de filología árabe e hijo del imán de la mezquita de su barrio. El chico llevaba un año y medio viviendo en el barrio junto a sus padres y su hermano.
Las alarmas saltaron cuando comenzó a buscar como crear una bomba conocida como 'bomba de satán'. Los vecinos se extrañan de su detención ya que aseguran que son una familia integrada.
Espejo Público ha hablado con su madre. La cuál preguntada por su estado de ánimo ha dicho: "Cómo va a estar una madre cuando se entera de una mentira tan grande". En todo momento, la madre ha defendido la honorabilidad de su hijo. "Mi niño es bueno. Solo estudia y juega al fútbol", ha explicado.
La madre ha explicado que había viajado a Tetuán con dos de sus hijos porque su madre se encuentra en coma tras sufrir un infarto y regresó el día 9 de abril a España, sin su hijo, que se quedó en Marruecos.
Asimismo, ha explicado que requisaron un Corán con anotaciones junto a los libros árabes con los que, según la versión de su madre, su hijo, de 23 años, hacía las traducciones.
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