La preocupación por el descontrol de la pandemia de coronavirus en Burgos ha llevado al Ayuntamiento de Burgos a usar a su Policía Local, que vigila que las medidas se cumplan, a que recomienden por megafonía a los vecinos que se confinen voluntariamente en sus casas. "El Ayuntamiento de Burgos recomienda el confinamiento voluntario en el domicilio", anuncian los agentes desde sus coches mientras desde el Gobierno central se les ha prohibido imponer esta restricción, aunque sí que se han endurecido otras normas.
El confinamiento domiciliario es sólo una petición, porque Castilla y León -aunque quiere- no puede ordenarlo. Ya son nueve las comunidades que han pedido que se les permita el confinamiento total de sus ciudadanos, pero el Gobierno central cree que el resto de medidas del estado de alarma permiten el control de los contagios. En Burgos, por el momento, esas otras restricciones siguen sin frenar la transmisión.
Test en Castilla y León
Mientras, la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades realiza ya cribados para la detección de coronavirus en centros residenciales públicos y privados de Castilla y León, para lo que cuenta con casi 65.000 test serológicos y otros 190.000 test de antígenos.
Asimismo, desde el inicio de la pandemia (y el estado de alarma) y hasta que acabe el año, se habrán destinado casi 5,5 millones de euros a la adquisición de Equipos de Protección Individual (EPI) repartidos en los centros dependientes de la Gerencia de Servicios Sociales con el objetivo de garantizar la salud de residentes y trabajadores.
