Desde hoy ya es obligatorio el uso de mascarillas en espacios cerrados y en la vía pública, siempre que no sea posible garantizar la distancia de dos metros para evitar contagios por coronavirus.
La nueva orden ministerial dictada por Sanidad busca cortar la cadena de contagios de la COVID-19 y, tras comprobar que el suministro de mascarillas está garantizado en España, han tomado esta decisión.
Durante estos primeros días, los agentes y fuerzas de seguridad no multarán a los ciudadanos que no la lleven, ya que su labor será pedagógica, recordando la obligación de su uso.
Pero pasados los primeros días, los agentes comenzarán a multar a todo aquel que no la lleve puesta. Y las multas, en función de si hay reincidencia o resistencia a la autoridad, pueden ir de 600 a 30.000 euros.
Hay que recordar que todo aquel que salga a hacer deporte no estará obligado a llevarla, pero deberá llevarla consigo para poder ponerse la mascarilla una vez termine de realizar el ejercicio.