En libertad provisional tras sacar a rastras el cadáver de una mujer y abandonarlo en una calle de Salt (Girona)

Un hombre de 52 años ha sido puesto en libertad con medidas cautelares por el juzgado de instrucción 2 de Girona, por su papel en la muerte de una mujer cuyo cuerpo apareció durante la madrugada del lunes pasado en una calle del municipio de Salt, Girona. Los investigadores creen que el investigado habría trasportado y abandonado el cuerpo de la mujer desde su casa hasta la calle por miedo a las consecuencias.

Fue el lunes pasado cuando a primera hora de la mañana una vecina de la zona encontró el cadáver de la mujer, en un lateral de Avinguda Països Catalans de Salt (Girona). Al llegar los equipos de emergencia solo pudieron constatar su muerte. En un primer momento, las autoridades hallaron indicios que no descartarían que pudiera tratarse de una muerte violenta, no obstante aún se desconoce cuál ha sido el resultado de la autopsia.

Poco después, los Mossos d'Esquadra detuvieron a un hombre de 40 años y originario de Ghana por su presunta relación con la muerte. El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha explicado este jueves que al sospechoso se le ha retirado el pasaporte, no podrá salir del país, y tendrá que comparecer ante el juzgado. Durante la declaración únicamente ha contestado a las preguntas de su defensa, y la causa permanece abierta por un delito de omisión de deber de socorro.

'La Vanguardia' recoge que los agentes de la Unidad de Investigación (UI) de los Mossos, tras analizar las cámaras de edificios próximos al lugar donde se halló el cadáver, constataron que se veía al investigado sacando el cadáver de un bloque a rastras. La principal hipótesis apunta a que el arrestado y la mujer fallecida estuvieron consumiendo estupefacientes en un piso, que habría sido donde murió la mujer. Acto seguido, el sospechoso, por miedo a las consecuencias, optó por abandonar el cuerpo en la calle.

La Guardia Civil busca la cabeza de una mujer asesinada

Hace tan solo unos días, trascendió el brutal asesinato de una mujer de 65 años a manos, presuntamente, de su pareja en la localidad madrileña de Soto del Real. El hombre se trataba de un policía local jubilado que, tras matar y degollar a su pareja, se habría suicidado. Los fallecidos -un hombre de 53 años y una mujer de 65- eran pareja y estaban en trámites de separación, aunque no constan denuncias previas por malos tratos y ninguno de los dos se encontraba registrado en el sistema VioGén.

Fuentes de la investigación han confirmado que los agentes están buscando la cabeza de la fallecida. Todo apunta a que, presuntamente, el policía jubilado primero la decapitó, después habría dejado esta parte del cuerpo en otro lugar y posteriormente regresaría a la casa donde se suicidó.

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