El consejero de Cultura, Pedro Alberto Cruz, ha asegurado que el municipio lorquino ha sufrido la mayor catástrofe patrimonial de Europa "desde que la localidad italiana de Asís fue asolada por otro terremoto hace unos años" y "lamentablemente se han venido abajo 20 años de recuperación de patrimonio histórico y cultural de Lorca", pero, subrayó, "los vamos a levantar de nuevo".
En rueda de prensa el consejero, "la voluntad firme y entusiasta de la Comunidad, del Ayuntamiento y Ministerio es absoluta, estamos perfectamente coordinados y que los lorquinos pueden confiar en que su impresionante rico legado cultural pronto volverá a lucir el esplendor que yacía hasta el momento".
Acompañado por la directora general de Bellas Artes y Bienes Culturales del Ministerio de Cultura, Angeles Albert, el consejero señaló que "hemos tenido la mala suerte de que muchas iglesias que acababan de ser rehabilitadas como consecuencia del seísmo se han venido abajo en alguna de sus partes y es una fatalidad con la que no contábamos".
Pero, apuntó, "tenemos que partir de la realidad que ahora tenemos"; "somos optimistas y al igual que sucede en otros ámbitos del municipio, vamos a tirar hacia delante y llevar a Lorca a su normalidad, que es lo que necesita en estos momentos".
Desde primer momento, añadió, "se ha dado un ejemplo de coordinación entre diferentes instituciones y estamentos, hemos actuado en dos líneas: la de la evaluación y la de la actuación a través de una serie de medidas urgentes".
Así, desde primera hora de la mañana, se han destinado dos grupos de trabajo a Lorca y municipios próximos (Puerto Lumbreras, Alhama, Aguilas, Totana y Aledo), donde no se han detectado daños importantes.
Desaparece gran parte del perfil del castillo
En lo que se refiere al municipio lorquino se han asignado equipos de arquitectos a los diferentes bienes inmuebles BIC, y tras el balance el consejero ha destacado que "en cuanto a los bienes muebles no hay daños significativos, salvo en el Museo Arqueológico, donde han piezas afectadas".
En cuanto a los bienes inmuebles "el panorama cambia absolutamente", lamentó el consejero en rueda de prensa, quien apuntó que el Castillo de Lorca "está muy afectada".
En concreto, explicó, "la Torre del Espolón se ha partido, e incluso se ha desplazado con respecto a su posición inicial" y la tercera parte de su altura "se ha desmoronado", con lo cual, señaló, "podríamos decir que gran parte de su perfil ha desaparecido", a lo que se une que varias zonas de la Muralla se han desprendido.
La Ermita de San Clemente, que se había consolidado hace poco tiempo "lo que la ha salvado", dice el consejero de Cultura, tiene daños graves en los muros, así como el Convento de la Virgen de las Huertas en el remate de la torre. Al tiempo que destacó que "los restos islámicos del Siglo XIII se encuentran en perfectas condiciones y sus valiosas pinturas".
Cruz, que contó como anécdota que junto con el director general, Enrique Ujaldón, y algunos voluntarios, sacaron la talla de la Purísima de Roque López "por miedo a que hubiera algún desprendimiento más y la dañase", con lo cual "hemos estado al pie del cañón".
Seguidamente, el consejero indicó que la Colegiata de San Patricio podría ser el inmueble menos dañados de todos, "a falta de un diagnóstico final". En cuanto al resto de parroquias históricas "nos encontramos con gravísimos daños estructurales". De hecho, la de Santiago "está en ruinas" y parece que sobre ella "ha caído una bomba".
Hay una excepción, remarcó, "en las iglesias de los barrios altos que en general se encuentran en buen estado". Tras lo que comunicó que la zona nueva del Museo Arqueológico es la que más afectada se ha visto. También se han visto afectados el Parador, aunque no han valorado su gravedad.
Cierre de iglesias históricas
Así, las administraciones han decidido como líneas urgentes evacuar los medios muebles en peligro que se encontraban dentro de los edificios, y ahora "están a buen recaudo", detalló Cruz, además del cierre de todas las iglesias históricas de Lorca "durante un tiempo indefinido" porque "su estado es, en algunos casos, ciertamente peligroso".
Otro de las medidas, concluyó, ha sido el apuntalamiento para evitar derrumbes, así como la recogida de documentación gráfica "y exhaustiva" de todos los lugares que se visitan "por si hubiera que reintegrar elementos arquitectónicos, escultóricos o pictóricos y tener una buena cartografía con la cual operar".
Por su parte, directora general de Bellas Artes y Bienes Culturales del Ministerio de Cultura, que ha mostrado la colaboración del Estado, ha indicado que "este legado histórico es el futuro de muchas comunidades y desde luego un futuro en el que tenemos que poner todos los esfuerzos para recuperar cuanto antes y ponerlo a exposición de los ciudadanos".
Patrimonio de todos
Ahora, añadió, "la prioridad es garantizar que se eviten más desprendimientos y que haya más pérdidas, planificar las intervenciones e insistir en la actuación coordinada y conjunta de las administraciones".
Tras lo que pidió un poco de "paciencia" de los ciudadanos "y que entiendan que lo mejor es trabajar coordinadamente en defensa del patrimonio, que es de todos".
