La Asamblea de Barrios por un Turismo Sostenible (ABTS), apoyada por la FAVB, ha pedido dejar de invertir dinero público en promocionar el turismo en la capital catalana y ha urgido el desmantelamiento de Turismo de Barcelona y crear una Agencia Municipal de Turismo para revertir la situación.
ABTS ha valorado que los barceloneses hayan situado por primera vez el turismo como su principal preocupación, según el barómetro municipal hecho público la semana pasada. Los vecinos resaltan que "ya es más numerosa la población favorable a limitar el turismo que la partidaria de traer más" y auguran que aún lo serán más tras un verano en el que se espera un récord de visitantes a la ciudad.
La asociación vecinal considera que "ha muerto el relato feliz del turismo como motor deseable de la economía de la ciudad, supuesto portador de riqueza y empleo a su población", que considera "una mentira vendida como verdad mediante la repetición propagandística desde diversas instituciones públicas y los 'lobbies' privados, que resulta ya insultante".
Los vecinos consideran que el turismo ha traído "riqueza para el empresariado" y "puestos de trabajo híper-precarizados y de miseria para la población". Además, acusan a Turismo de Barcelona y al Gremio de Hoteleros de "fabricar el fenómeno de la 'turismofobia', en un intento patético de criminalizar la denuncia y las víctimas de su actividad".
ABTS advierte que la Generalitat prepara un decreto sobre actividad turística "basándose en el axioma explícito de la supuesta inocuidad de esta sobre la población y el territorio" y recrimina al conseller Jordi Baiget reunirse "únicamente con el sector privado ignorando la sociedad civil organizada".
Los vecinos avisan de que cada semana se celebra la llegada de nuevas líneas aéreas a El Prat o la construcción de una nueva terminal de cruceros, lo que supone "un contexto de aceleración del proceso de turistización y de devaluación creciente de la vida cotidiana local".
Además de la falta de redistribución de riqueza, ABTS también denuncia que "el sector turístico está destruyendo derechos individuales y colectivos con el fin de aumentar sus ganancias", en alusión a la proliferación de fraudes en alojamientos turísticos".
La saturación de calles y plazas, de la red de transporte público, los problemas ambientales de proliferación de residuos y contaminación y la explotación del espacio urbano como parque temático son algunos de los problemas que menciona ABTS.
"No hay soluciones mágicas, pero sí caminos evidentes", asegura la plataforma vecinal, que apuesta por "el decrecimiento turístico, la 'desturistización' de la economía y la involución del monocultivo".
"Para empezar, es urgente dejar de invertir dinero público en la promoción del turismo en Barcelona", plantea ABTS, que exige "el desmantelamiento de Turismo de Barcelona, un ente totalmente opaco y con graves déficits democráticos que hace y deshace las políticas turísticas (y otras) de la ciudad desde hace décadas y su sustitución por una Agencia Municipal de Turismo, encargada no ya de la promoción sino del control férreo de un sector insaciable".