Una madre gana un juicio para poder vacunar contra el Covid-19 a su hija ante la negativa del padre

Las disputas entre padres divorciados por administrar o no la vacuna contra el Covid-19 a sus hijos vuelven a ser protagonistas, esta vez, en Alicante. La madre de una niña de 12 años quería inocular la vacuna covid a su hija. Algo con lo que su padre no estaba de acuerdo porque, alega, que las vacunas del coronavirus están en fase experimental y que la menor, que sufre un desorden genético, podría sufrir efectos secundarios más graves.

Ante el desacuerdo entre progenitores, la madre formuló una demanda contra su exmarido para que fuese la Justicia la que decidiese sobre la inmunización de su hija. La jueza del Juzgado de Primera Instancia número 8 de Alicante ha sido la encargada y su decisión ha sido clara: la menor se vacunará contra el coronavirus.

La niña quería vacunarse

Así consta en un auto al que ha tenido acceso Alicante Plaza que, además, señala que la adolescente sí estaba a favor de recibir la inyección de la vacuna covid aunque necesitaba la autorización de sus dos padres, en principio, para poder hacerlo, tal y como regula el actual convenio vigente al respecto.

Parece ser que a la alicantina de 12 años le pusieron la primera dosis en agosto, pese a la oposición del padre, y estaba pendiente la segunda para septiembre. La niña expresó "claramente" su voluntad de ser vacunada contra el Covid-19 pese a que su padre trataba de convencerla de lo contrario con los argumentos anteriormente expuestos.

La EMA y Sanidad respaldan la vacunación en menores

La jueza ha autorizado a la madre de la niña a que sea ella quien tome exclusivamente la decisión justificando que las autoridades sí apoyan la vacunación de los jóvenes a partir de los 12 años. Así lo segura la Agencia Europea del Medicamento, que aprobó la utilización de la vacuna covid en menores de 12 a 17 años y Ministerio de Sanidad, que incluye en el plan de vacunación a los adolescentes comprendidos entre estas edades. "Está clara la postura de la autoridad sanitaria de nuestro país, favorable a dicha vacunación", dictaminó.

Además, le quita la razón al padre porque "no aporta prueba alguna" que acredite que las circunstancias de la menor, la patología genética que tiene, supongan un riesgo para la vacunación de la menor. Y añade, que la niña es la titular del derecho a su salud y del derecho a la información, por lo que su "deseo, voluntad y preferencia de ser vacunada, debe ser tenido en cuenta en la resolución de la controversia suscitada, aunque la menor esté sujeta a la patria potestad de sus progenitores".

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