Madrid celebra San Isidro con un refuerzo de la seguridad para evitar aglomeraciones y botellones

Madrid celebra hoy la festividad de San Isidro con un refuerzo de la seguridad para evitar botellones y aglomeraciones en el primer fin de semana tras la caída del estado de alarma. Por segundo año consecutivo, tampoco se celebrará la tradicional verbena en la Pradera de San Isidro, que, además, permanece vigilada por los agentes de la Policía Nacional.

En los actos de esta festividad, también se han entregado las medallas de la ciudad a asociaciones y personas vinculadas a la lucha contra la pandemia y se ha reconocido con las medallas de oro a las anteriores alcaldesas, Ana Botella y Manuela Carmena.

Refuerzo policial

En este fin de semana de San Isidro, habrá al menos 2.240 agentes de refuerzo entre Policía Nacional y Policía Municipal. En algunos puntos estratégicos, como en la Pradera de San Isidro, habrá un refuerzo algo mayor de la seguridad. También, en el parque de Pradolongo y otros parques importantes del oeste de la capital.

Además, habrá nueve manifestaciones durante el fin de semana, los toros de El Pilar de Vistalegre, y la fiesta de la Pradera de San Isidro en Ifema, en la que se espera una afluencia de 6.000 personas.

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha subrayado que se trata de un "esfuerzo operativo gigantesco" y ha llamado a la responsabilidad de todos los madrileños para que San Isidro sea una "fiesta", pero respetando todas las medidas sanitarias establecidas por la pandemia de coronavirus y con el objetivo de que no se repitan imágenes como las del pasado domingo en las que se vieron aglomeraciones y botellones.

Medallas de la ciudad

Con motivo de la festividad de San Isidro, también se ha celebrado el acto institucional en la Palacio de Cibeles en el que se ha otorgado las medallas de la ciudad a diversas asociaciones y personas vinculadas a la lucha contra la pandemia de coronavirus en Madrid. En este sentido, Almeida ha asegurado que "estamos atisbando por fin el final de la pesadilla", aunque también ha llamado a la prudencia porque "no ha sido fácil llegar hasta aquí, ni será fácil el camino que todavía nos queda".

También se ha concedido las medallas de oro de la ciudad a las últimas dos exalcaldesas de Madrid, Manuela Carmena y Ana Botella. Tras recibir el premio, Carmena ha dicho que es necesario "reforzar las instituciones" e implantar una vida política "sin estructuras sectarias" y ha hecho un llamamiento a "cuidar la democracia".

Por su parte, Botella ha dicho que quiere que Madrid sea "una ciudad abierta, libre, en una España unida". También ha apelado a la "generación de españoles que dedicó sus mejores esfuerzos a la convivencia" y la "concordia" para tener "muy presente" su legado.

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